Un incendio forestal descontrolado ardía en las afueras de Madrid este jueves, que dejó una gigantesca nube de humo sobre la capital española.
El gobierno local pidió a los residentes que se queden en sus casas y mantengan cerradas las ventanas
En un caluroso día de sol, el Palacio de Cibeles madrileño quedó "sepultado" por la gran nube de humo de los incendios forestales.
Un incendio forestal descontrolado ardía en las afueras de Madrid este jueves, que dejó una gigantesca nube de humo sobre la capital española.
El incendio se desató en el municipio de Méntrida, en la provincia de Toledo, de la región de Castilla-La Mancha, a unos 50 kilómetros de Madrid. Las autoridades locales instaron a los residentes a quedarse en casa y cerrar sus ventanas.
El incendio había quemado alrededor de 3.000 hectáreas para el jueves por la noche, según se indicó oficialmente.
Bomberos desplegados en tierra y aire estaban trabajando para extinguir el fuego que comenzó alrededor de las 3 de la tarde.
El viento llevó el humo sobre Madrid, donde por la tarde los cielos se tiñeron de naranja y había una espesa nube humo.
Grandes partes de España están bajo advertencias por calor extremo e incendios, y el jueves la temperatura alcanzó los 37 grados en Madrid.
Europa es el continente que se calienta más rápido en el mundo, y las temperaturas aumentaron al doble de la velocidad del promedio global desde la década de 1980, según el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea.
Los científicos advierten que el cambio climático está exacerbando la frecuencia e intensidad del calor y las sequías, lo que hace que los lugares sean más vulnerables a los incendios forestales.