Esta vez le pudo ganar al VAR. A pesar de las protestas por el gol anulado, Newell’s tuvo una sólida y efectiva actuación y le ganó a Independiente por 2 a 0 en Avellaneda. Se levantó del porrazo en Santiago del Estero y endulzó la magra cosecha de visitante.
La lepra entró con la almohada al partido y casi lo paga caro. Independiente tuvo una doble posibilidad de estrenar el marcador, primero con Matías Giménez, que estrelló un remate en el palo izquierdo del arco de Lucas Hoyos. El propio arquero rojinegro salvó las papas en la segunda, tapándole un remate a Baltasar Barcia.
A los 7 minutos el equipo de Gabriel Heinze pudo salir de la cueva con una arremetida por izquierda de Angelo Martino, quien terminó la jugada probando al arco aunque sin demasiado riesgo para que Rodrigo Rey contuviera la pelota fácil.
El rojo se hacía amplio, aprovechaba cada metro del terreno de juego y desbordaba a Newell’s a gusto y comodidad. La aparición de Pablo Pérez en el once estaba fundamentada, entre otras cosas, en buscar un pase rápido que saltara líneas y dejara a algún compañero en posición franca de gol. Independiente mandaba toda la caballería arriba pero a la hora de retroceder sufría. Y la lepra explotaba el contraataque.
Así fue que llegó la apertura del marcador. No la estaba pasando bien pero fue efectivo. A los 15’, salida rápida, Cristian Ferreira se adueñó de la redonda, encaró contra el área y sacó un zapatazo rasante, donde se dice que duermen las arañas, para clavar el 1-0 leproso.
El local acusó recibo del golpe, quedó anestesiado y veía como el rojinegro comenzaba a desplegar filas, ahora jugando con la ventaja. De Pablo Pérez para Ferreira, de Ferreira para Brian Aguirre, todos tocando y haciendo jugar. Y con un Angelo Martino incontrolable por su andarivel y haciéndole un verdadero desastre a Luciano Gómez, a tal punto que Ricardo Zielinski lo terminó sacando prematuramente.
Justamente el exTalleres fue protagonista de la polémica de la noche. En otra corrida por izquierda, Martino le gana la posición a Barcia y saca un centro perfecto dirigido a la cabeza de Jorge Recalde para el 2-0, a los 22’. Cuando la lepra festejaba, Ariel Penel fue avisado por el VAR de una supuesta falta de Martino en la jugada previa y el árbitro terminó anulando el gol por un contacto del brazo izquierdo de Martino sobre la nuca de Barcia. Lo que derivó en la protesta airada de todo Newell's y la roja a Gabriel Heinze.
La trama pegó un giro de 180 grados y ahora el rojinegro tenía el rol protagónico de la historia en Avellaneda. Hasta pudo ampliar la ventaja con Recalde a los 45’, aunque Rey le privó el festejo. Independiente llevaba a cuestas una mochila de nervios, recargada por la poca paciencia de sus hinchas. Un contexto ideal para que la lepra pegara un mazazo de nocaut. El coro de silbidos cuando se cerraron las cortinas del primer tiempo confirmaron la teoría.
La incesante lluvia bautizaba el inicio del complemento. Independiente fue un espejo del arranque y salió a apretar rápido a la lepra. Pero fue más un envión desde el vestuario que una realidad. Se difuminó en un pestañeo.
Newell’s neutralizó a su rival, durmió el trámite, hizo pasar los minutos con la pelota y no sin ella. Mención especial para Recalde: ganó varias faltas, mostró el pivoteo habitual aguantando la pelota, y a eso le agregó un mayor anclaje al área, mejorando ostensiblemente su protagonismo y riesgo de cara al arco contrario.
A Independiente le quemaba la pelota y Newell’s estaba en plena serenidad. A los 72’, córner rojinegro, Aguirre la manda al área, Velázquez cabecea y la pelota rebota en el pecho de Elizalde y se le mete por debajo a Rey: 2-0 y calma.
Al partido ya no le quedaba demasiado más y fue una seguidilla de centros sin destino del rojo, buscando algún salvador en el juego aéreo. Newell’s no se desesperó y siguió parejito hasta el final. El flojo Ariel Penel dijo basta y los tres puntos se volvieron en el colectivo leproso.
¡EL ROJO CAYÓ ANTE LA LEPRA EN EL LIBERTADORES DE AMÉRICA! | Independiente 0-2 Newell's | RESUMEN