Una multitud de hinchas canallas se reunió anoche para celebrar el aniversario 129 de Rosario
Central que organizó el club desde las 20 en la sede fundacional, en Alberdi al 100. La fiesta tuvo una alegría desbordante y una convocatoria mayor a la de otros años -calculan entre 18 y 20 mil personas- por el reciente título que consiguió en Copa Argentina. Pero a la madrugada hubo serios incidentes con la policía que terminó con cinco efectivos heridos.
El vicepresidente segundo de Central, Martín Lucero, contó a "Zysman 830" de La Ocho, que "una vez que ya había terminado la fiesta, se estaba desarmando el escenario, quedó un grupo de hinchas festejando y cuando la policía los quiso dispersar hubo algún tipo de incidente".
"No tenemos la referencia exacta de cual fue la magnitud del hecho, sabemos que eran pocos, pero la referencia que tenemos es de los trabajadores que se encontraban desarmando el escenario y los vallados", describió.
Lucero dijo que aún no tenían conocimiento oficial de heridos, ni notificaciones de la policía, sólo el relato de algunos socios e hinchas que se habían quedado hasta la madrugada. "La fiesta ya había terminado, fue incluso después de que la mayoría de la gente se había dispersado, el área de seguridad del club está trabajando para determinar qué sucedió", agregó.
Mauro, uno de los hinchas que permanecía a la madrugada en la zona del cruce Alberdi y que colaboró con el evento, contó su versión de lo ocurrido. "Cerca de las 3 de la mañana, estaba cerca de la puerta de la sede fundacional, en la esquina para el lado del shopping estaba vallado y se encontraba la policía, en un momento abren las vallas, llegan las fuerzas de choque y salen caminando hacia donde estaba la gente, unas mil quinientas personas. Empiezan a reprimir con balas de goma al aire y a pegar con palos para que la gente se vaya", relató.
"A esa hora, había botellas de vidrio, envases por la mitad, bombas de estruendo, y la gente que había tomado alcohol, volaban cosas por todos lados, diríamos que se armó una batalla", contó.
"Llega otra fuerza de choque, por el otro lado, por el cruce Alberdi y encierran a la gente que empieza a salir corriendo para el lado del Viaducto. Yo tenía al jefe del operativo al lado, le pedí que no dispararan más, y le decía que yo iba a ir a frenar a algunos que conocía y estaban en la situación, para frenar lo que pasaba. Pero igual nos pegaban, tengo más de diez palazos en la espalda, me ponía adelante y le pedía que pararan pero seguían pegando".
"Estaban ensañados en sacar a la gente, no había necesidad porque la gente estaba tranquila y no pasaba el vallado. Ellos decían que la gente le había empezado a tirar cosas", manifestó Mauro y dijo que los incidentes se extendieron durante "20 o 30 minutos".