El refugio Sol de Noche finalizó su temporada este domingo y ahora deberá buscar un nuevo lugar para poder albergar a los más necesitados durante la temporada de invierno del año que viene. Ocurre que la organización religiosa, dueña del inmueble, dio por finalizado el contrato y después de una década habrá que buscar otro refugio para que personas en situación de calle puedan pasar un invierno un poco más apacible pese a la crisis alimentaria y social que atraviesa el país.
En declaraciones al programa "Todos en La Ocho", el presidente de la organización, Juan Pablo Locatelli, para adelantar que ya comenzaron a iniciar gestiones con otros sitios capaces de poder albergar todo el mobiliario y un espacio acorde para albergar personas, una situación no tan sencilla en los tiempos que corren.
"Dimos por finalizada la temporada 2024 y nuestra estadía en Pasaje Marconi 2040", confirmó Locatelli para anticipar que ya comenzaron a trabajar en una "mudanza gigantesca".
"Tenemos camas, colchones, cocina, mercadería, ropa, un montón de elementos para trasladar. Gracias a un colaborador, que facilitó un galón, y a un camión de mudanzas, ese mismo domingo comenzamos a desmantelar el refugio", comentó.
En haras de encontrar un nuevo espacio para el histórico refugio humanitario de invierno, Locatelli confirmó que "hay gestiones avanzadas, una en particular, pero aún no hay nada concreto para que podamos confirmar un lugar definido para el año que viene".
El refugio Sol de Noche albergaba a 35 personas en pleno invierno, pero esa propiedad pertenece a los hermanos Scalabrinianos, dependientes de la orden Misioneros de San Carlos.
"Funcionamos ahí desde hace 12 años. Toda esa manzana del Pasaje Marconi pertenece a los sacerdotes Scalabrinianos en la iglesia La Roca. es una congregación internacional y a fin de año pasado nos notificaron que no se iba a renovar el contrato, que renovábamos cada tres años", reseñó.
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Es por eso que desde que se enteraron en julio pasado que ya no sería renovado un nuevo contrato comenzaron a realizar gestiones para revertir esa situación y no lo pudieron lograr. "El carisma de la congregación está pensado como refugio de inmigrantes, pero habíamos logrado una prórroga para poder quedarnos sin refugio este año", apuntó.
Asimismo, anticipó: "Este nuevo lugar en vista hay que hacerle reformas, reparaciones y adaptaciones. Para eso necesitaremos un margen de unos meses para comenzar a trabajar de cara a abril 2025 para abrir nuestras puertas".
Locatellí también agradeció la predisposición de Desarrollo Humano y Hábitat del municipio, del Concejo Municipal y la provincia. "Es una institución que tiene muchos años, mucha trayectoria, por eso tuvimos muy buena predisposición de todas las partes", valoró.