A Gonzalo José Norese su gente lo reconocía por su apodo: El kiry. El jueves, al filo de la medianoche, el muchacho estaba con un grupo de amigos en el barrio La Bajada, en la zona sureste de la ciudad, cuando desde un auto en movimiento abrieron fuego con un arma de puño. Uno de esos plomos impactó en el abdomen del joven, de 27 años, hiriéndolo de muerte. Tras la desesperación inicial, uno de sus amigos lo trasladó hasta el hospital Roque Sáenz Peña, desde donde lo derivaron al Hospital de Emergencias. Allí falleció a las 2.45 de ayer.
"Mi hijo era un atorrante lindo. Fanático de Central. Muy querido por sus amigos. Un pibe que no tenía problemas con nadie. No entendemos nada de lo que pasó. Sus amigos nos cuentan que pasó un auto, que alguien disparó a los del grupo, que eran como 30 personas y justo le pegaron a él", explicó a este diario Norma, la mamá de El kiry.
Oficialmente, El kiry Norese fue herido en inmediaciones de Uriburu y Ayacucho y la policía tomó conocimiento del hecho a partir de la comunicación protocolar hecha desde el hospital Roque Sáenz Peña cuando el muchacho herido de bala ingresó a la guardia.
Sin embargo, durante buena parte de la jornada de ayer no se tuvo claro dónde sucedieron los hechos. En diálogo con pesquisas, éstos mencionaron una canchita de fútbol ubicada en cercanías de Ayacucho y Benito Juárez, frente al paredón del ex Batallón 121, a dos cuadras del cruce de calles donde habrían baleado fatalmente a Norese.
"Lo que manifiestan los amigos de la víctima es que habían jugado un partido de fútbol y estaban por comer un asado en ese lugar cuando sucedió el hecho. Pero como no hubo una participación directa e inmediata por parte de la policía, se está trabajando con las declaraciones de los testigos para determinar dónde está ubicada la escena del crimen", explicó un vocero allegado a la pesquisa, en manos de la jueza de Instrucción Alejandra Rodenas.
Al respecto, al cierre de esta edición un vocero de Jefatura manifestó que se estaban tomando las primeras declaraciones a los testigos del crimen y que de las mismas se desprendía que "era un grupo de unas 20 personas de las cuales la víctima sólo era amiga directa de tres o cuatro de ellos. Que después del partido y mientras esperaban para ir a comer se reunieron en varios grupos en la vereda y que en ese momento pasó lentamente frente a ellos un vehículo oscuro y que desde la ventanilla de atrás hicieron dos disparos al voleo".
Un hincha veneno. Gonzalo Norese era uno de cinco hermanos. Vivía con su familia en Maipú al 2400, bastante lejos de donde lo hirieron de muerte. "Gonza siempre se las rebuscaba. Trabajaba una semana en pintura, después estaba otra semana sin trabajar hasta que enganchaba algo de nuevo. Era muy amigo de sus amigos. Un tipo que siempre estaba dispuesto a dar una mano", describió Norma, entre sollozos.
El kiry era hincha veneno de Rosario Central y vivía sus días en azul y oro. "Con sus amigos era de la «Banda del Oreja» (por una de las banderas que suelen adornar el estadio cuando juega el equipo canalla)", sostuvo la mujer.
"La última vez que lo ví fue a las 17.10 (del jueves). Me preguntó si yo iba a buscar a mi nieto a la escuela y me dijo que salía a la casa de un amigo. Me pidió unos centavos que le faltaban para el colectivo y no lo ví más. A las 10 y pico de la noche me llamó por teléfono uno de sus amigos. Primero me dijo que una bala le había rozado la panza, pero después se quebró: «No te puedo mentir a vos. Le pegaron un tiro y está muy grave»", recordó entre lágrimas.
Ante tantos datos cruzados, entre versiones policiales y rumores callejeros, la mamá de Norese desmintió que Gonzalo fuera barra brava de Rosario Central. "El era un hincha más que juntaba las monedas para ir a ver a Central. Y cuando no tenía para la entrada, se iba igual y me decía: «Voy a ver cómo hago para entrar»", recordó.
En la charla con la mamá de la víctima quedaron flotando dos cosas. Que la bala que mató a Gonzalo presuntamente no lo tenía como blanco, y que el matador es conocido al menos por una parte del grupo en el que estaba El kiry. "Los amigos de Gonza me dijeron que le dispararon a uno del equipo rival y que saben quien fue. Lo que yo quiero es que la policía actúe para que estos pibes no hagan locuras", explicó la mujer.
Gonzalo no tenía antecedentes policiales. Era soltero y no tenía hijos. "No sé como se lo voy a decir a mi sobrino, porque Gonza era como un padre para él", comentó Norma. El crimen de Norese es investigado por la sección Homicidios de la policía rosarina.