El presidente Evo Morales declaró que el ex espía estadounidense Edward Snowden le pide asilo, se lo otorgará en protesta por el "bloqueo aéreo" de cuatro países europeos al avión presidencial que lo traía de regreso de Moscú esta semana. Bolivia se sumó así a la decisión de los gobiernos Venezuela y Nicaragua, que el viernes ofrecieron asilo al ex agente varado en un aeropuerto de Moscú.
"Quiero decirles a los europeos y norteamericanos, como justa protesta, (que) ahora daremos asilo a ese norteamericano (Snowden) perseguido por sus compatriotas. No tenemos ningún miedo", dijo el mandatario en la entrega de obras en el pueblo indígena de Chipaya en el altiplano sur de Bolivia.
"Me acusaron de que yo traía a ese ex agente. Yo sólo sabía por la prensa de ese caso. Quiero que sepa el gobierno de Estados Unidos y de algunos países europeos, (que) daremos asilo por razones humanitarias a perseguidos políticos, a perseguidos por denunciar espionaje de Estados Unidos", agregó. El boliviano no aclaró si recibió un pedido formal de Snowden.
Europeos en la picota.Morales acusó de España, Francia, Italia y Portugal de haberle cerrado el paso por sus zonas aéreas bajo la sospecha "infundada" de que ocultaba en su avión a Snowden, por presión de Estados Unidos, obligándolo a permanecer más de 13 horas en una sala del aeropuerto de Viena a donde desvió su vuelo el martes a la noche. "Ahora nos amedrentan, nos quieren acallar, nos quieren escarmentar. Yo diría que nos quieren escarmentar los europeos para que no haya otro presidente indígena. Eso buscan, quiero decirles que no van a poder porque hay conciencia en el pueblo", declaró Morales en presencia del presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim.
En declaraciones anteriores, Morales señaló que su decisión de impedir que se requisara su avión prolongó la crisis.
Por su parte, el presidente venezolano Nicolás Maduro declaró el viernes en Caracas que "Venezuela, ha decidido ofrecerle asilo humanitario al joven Snowden" para protegerlo "de la persecución que ha desatado el imperio más poderoso del mundo", en referencia a Estados Unidos. A su vez, el gobernante de Nicaragua, Daniel Ortega, dijo que su país ya recibió un pedido de asilo del estadounidense y agregó que "si las circunstancias lo permiten nosotros recibimos con todo gusto a Snowden".
El canciller español José Manuel García-Margallo declaró que España no se disculpará porque "nunca cerró" su espacio aéreo al avión de Morales y restó importancia a las críticas de los seis presidentes sudamericanos. Francia ofreció una disculpa al canciller boliviano por "demorar" la autorización de sobrevuelo, según un comunicado de su cancillería enviado antes de la reunión de seis mandatarios en Cochabamba.
Rusia quiere que se vaya. En tanto, Rusia parece entusiasmada con la perspectiva de que Snowden deje el país. "Un asilo para Snowden en Venezuela sería la mejor solución. Este país tiene un serio conflicto con Estados Unidos. Las cosas no pueden ir a peor. (Snowden) no puede vivir eternamente en (el aeropuerto de) Sheremetievo", comentó ayer en Twitter Alexei Pushkov, jefe de la comisión de Asuntos Exteriores de la Duma, la cámara baja del Parlamento ruso. "Rusia no quiere que esté ahí. Si hubiera querido otorgarle asilo, lo hubiera hecho inmediatamente", comentó Maria Lipman, representante en Moscú del Centro Carnegie. La analista subrayó que el presidente Putin, un ex espía del KGB, no debe sentir mucha estima por el fugitivo, aunque haya descartado categóricamente extraditarlo a Estados Unidos. "Putin no va a ayudar a alguien que revela secretos de Estado", aseguró Lipman.
"No tenemos ningún interés por él, nos gustaría que se fuera a otra parte", dijo por su lado Alexandre Konovalov, experto del Instituto de Evaluaciones Estratégicas de Rusia.
Un viaje difícil.Pero pese a las ofertas de Nicaragua, Venezuela y ahora Bolivia, persisten no obstante muchas incertidumbres sobre la manera en que Snowden, cuyo pasaporte fue anulado por Estados Unidos, podría viajar a un país de acogida sin ser interceptado por los estadounidenses.
No puede teóricamente ni siquiera abandonar la zona de tránsito del aeropuerto moscotiva de Sheremetievo para ir a otro aeródromo, como por ejemplo el cercano de Vnukovo, adonde llegan los aviones de los dignatarios extranjeros. Tampoco existe un vuelo comercial directo entre Moscú y Caracas, o Moscú y Managua, lo que obligaría al vuelo que lo lleve a Snowden a hacer escala en otro país, que a su vez debería darle luz verde para volver a salir. Otro riesgo es que los países rehusen al avión que lleva a Snowden abrirle su espacio aéreo. Situación que el presidente Evo Morales conoce personalmente.