Los británicos de Level 42 llegan por primera vez a los escenarios argentinos. Uno de los grupos que son su sonido marcó el pop de los 80 se presenta hoy en el teatro Coliseo de Buenos Aires, para abrir un ciclo titulado Jazz Nights. Fundado y liderado por el bajista y cantante Mark King, Level 42 adquirió popularidad a partir de hits irresistibles, gracias a la fusión con el jazz y el funk. "Todavía se necesita de la inspiración para componer una gran melodía", dijo King, para desafiar el bombardeo mediático de música liviana, a la que le sobra tecnología pero le faltan sutilezas rítmicas y armónicas.
Para conocer la situación actual de Level 42, que en los 80 creó hits de alcance mundial como "Lessons in Love", "Running in the Family" e "It"s Over", y que vendió más de 30 millones de placas a lo largo de sus dos períodos (1979-1994 y desde el 2001 hasta la actualidad), Télam dialogó con Mark King, quien ganó prestigio además por su particular modo de tocar el bajo con su estilo slap, que fue una influencia relevante para los músicos de su generación.
—¿Podrías contarnos qué show de Level 42 se verá en Buenos Aires y qué tipo de versión del grupo, si una más pop, más jazzera, dance o electrónica?
—Todas esas posibilidades sonoras son parte de Level 42 y no renegamos de ninguna, sino que más bien intentamos ir encontrando una sonoridad propia y personal a través de esos diferentes planos. Respecto del show, verán a la nueva formación de Level 42 haciendo muchos de los hits clásicos que todos conocen pero mezclándolos con nuevos arreglos y con el approach actual de la banda.
—¿Cómo se dio la incorporación de los nuevos integrantes y qué cambios trajo aparejada?
—Creo que las incorporaciones ensancharon el sonido y se dieron en los vientos con Dan Carpenter en trompeta, Nichol Thompson en trombón y Sean Freeman en saxo, que se sumaron a los que ya estábamos: Mike Lindup, en teclados y voz; Peter Ray Biggin en batería; Nathan King en guitarra, y yo, en bajo y voz. Fue muy interesante todo el proceso de volver a arreglar las canciones y encontrarles nuevas alternativas que pudieran integrar las texturas que se incorporaron con estos músicos.
—La influencia de la música negra en Level 42 se prolonga hasta nuestros días. ¿Te gustan músicos como Kanye West, Jay-Z o The Weekend?
—Recuerdo que la primera vez que escuché Fela Kuti me quedé muy impresionado. Estábamos en una gira por Holanda en 1981 y el groove polifónico sonaba tan fresco que me conmovió, pero a su vez me trajo a la mente a James Brown, nada menos.
—¿Qué tipo de música escuchás actualmente?
—En estos días mis gustos musicales se han ampliado y escucho todo tipo de música, solo tiene que llegarme a nivel personal; como dijo el gran Miles Davis una vez: "Sólo hay dos tipos de música: buena y mala".
— ¿Qué sientes que cambió en la música desde los años 80 hasta ahora?
—La tecnología que existe es sorprendente. Poder producir música de principio a fin desde tu dormitorio o jardín es genial y por este mismo motivo no me sorprende que haya tantos nuevos artistas emergiendo. Pero atención, dicho esto, todavía se necesita de la inspiración para componer una gran melodía; eso siempre va a ser así.
—¿Les gusta girar en el marco de festivales de jazz o prefieren el circuito por el que rotan las bandas exitosas de los 80?
—La música es un lenguaje universal, en ese sentido no me preocupa si hacemos jazz o pop ni tampoco si tocamos en uno u otro sitio, a lo único que aspiramos es a hacer felices a las personas que vienen a vernos.
—¿Cómo te tomó la muerte de Prince?
—Fue muy duro, cuando me enteré que había fallecido quedé shockeado como todo el mundo. Tenía un talento gigante y deja detrás un legado hermoso, creo que tenemos que estar agradecidos de haber estado en la Tierra cuando él hacía esa música maravillosa.
—¿Seguís tocando slapping?
—¡Sí, claro! El slap es un estilo que amo tocar y tengo mucha suerte en estar en una banda que me deja hacerlo.