El Teatro El Círculo inaugura su temporada 2024 con una “puesta única y renovada” de “La Bohème”, la icónica ópera de Giácomo Puccini. Esta nueva producción original, realizada por un destacado elenco y equipo técnico con personas de todo el país y protagonismo local, llega en el marco del 120º aniversario de la institución. Después de una primera función extraordinaria el domingo pasado, habrá una para abonados el jueves 25, a las 20, y otra para todo público el sábado 27, a la misma hora.
El elenco estará integrado por la soprano rosarina Daniela Ratti en el rol de Mimi, el tenor tucumano Iván Vega como Rodolfo, los barítonos Cristian Maldonado (Marcello) e Ismael Barrile (Schaunard), la soprano Patricia Villanova, en el rol de Musetta, y los bajos Augusto Nureña y Roman Coccalotto como Colline. Estarán acompañados por el Coro de la Ópera de Rosario, que dirige Horacio Castillo. Por su parte, el maestro Javier Mas estará al frente de la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario, en el rol de dirección musical de la puesta.
“La Bohème” es una ópera en cuatro actos con música de Giácomo Puccini y libreto en italiano de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, basado en “Escenas de la vida bohemia” de Henri Murger. Se estrenó el 1 de febrero de 1893 en el Teatro Regio de Turín, y si bien en su momento no tuvo reconocimiento de la crítica, se convirtió en una de las obras más destacadas y populares de la historia del género a nivel internacional.
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En una reposición de la ópera "La Bohème", situada en 1960, proponen acercar a nuevos públicos al género.
Foto: cortesía Raul Schivazappa
A pesar de tener más de un siglo, la obra sigue resonando con el presente. Con elementos autobiográficos, que narran su propia experiencia como un estudiante de música sin dinero en Milán, “La Bohème” sigue a cuatro jóvenes artistas bohemios que viven precariamente en el Barrio Latino de París, y experimentan una serie de aventuras mientras comparten habitación. El amor entre Mimí y Rodolfo, la enfermedad y la muerte son elementos clave de la trama.
“Elegimos esta ópera por varias razones. En primer lugar, por su contenido poético en los textos y música, y también por ser un año mundial Puccini, dado que se cumplen 100 años de su fallecimiento”, contó Guido Martínez Carbonell, presidente del Teatro El Círculo, en diálogo con La Capital. “Esta puesta de ‘Bohème’ es única y renovada. Más allá de la excelencia de sus artistas, tiene una escenografía moderna lo que le da una vuelta de fisonomía”, agregó.
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Una propuesta renovada
Desde el propio póster, que remite a una ilustración de historieta clásica de los sesenta, se deja ver que la propuesta estética de esta puesta no será tradicional. Esto es, en gran parte, resultado del trabajo de Carolina Basaldúa en la dirección escénica, y Julián Ezquerra en el diseño de escenografía.
“Sabemos que Bohème es una de las obras que más se representan en el mundo, por eso quisimos buscar una frescura, y presentarla de una manera renovada, cercana, contemporánea. Encontramos que la época original de la trama, que es 1840 y donde una de las corrientes estéticas predominantes era el realismo, tenía varias analogías con 1960, cuando se gesta el Mayo Francés y aparece el nuevo realismo”, contó Basaldúa en diálogo con La Capital.
Este cambio temporal les permitió un primer movimiento de acercamiento para mostrar “una sociedad más cercana” a la actual y generar una aproximación al espectador. Por su parte, Ezquerra aseguró que este cambio no tiene que ver con “reinventar la obra o tergirversarla” sino “entender la fidelidad” a partir del ejercicio de buscar tener en el público actual un efecto similar al que puede haber tenido en su momento.
Además, la dupla asegura que este corrimiento de época no se expresa de forma meramente cosmética en la puesta, sino que aparece tanto en la dramaturgia como en la propuesta escénica. A nivel escenográfico, se muestran tres espacios del último piso de un edificio parisino: la habitación compartida de los personajes varones, el pasillo y el baño en común, y la habitación propia de Mimí (un rasgo original de esta reposición). Mostrar la vida en simultáneo de los personajes en estos espacios, más allá de la intervención de unos y otros sobre cada momento de la trama, permite dar cuenta del espíritu de grupo que caracteriza a este conjunto de artistas, esta vida comunitaria que es clave para la obra.
Otro punto es que Mimi ya no es una “simple costurera”, alejada de los verdaderos artistas que son los personajes masculinos (un poeta, un pintor, un músico y un filósofo), sino una diseñadora de modas con su propia búsqueda estética. Finalmente, el hecho de que los nuevo realistas representados en la obra trabajaran con materiales reciclados hizo que Basaldúa y Ezquerra buscaran reflejar esto también la puesta: los módulos centrales que conforman la escenografía rotan y cambian, a la vista del público (musicalizados con música de Puccini que no pertenece a “La Bohème”), reciclándose a sí misma para significar distintos espacios y momentos de la trama.
La Bohème “es también un gentilicio”, esa bohemia que adoptó distintas formas en cada época pero siempre existió, afirmando una vida en los márgenes que es en sí misma una declaración de principios y una forma de estar en el mundo: una donde reina la sensibilidad, el rechazo al mercado y la solidaridad entre pares. “En un tiempo en el que impera, como casi siempre y de nuevo, el utilitarismo, la crueldad y el individualismo, revisitar La Bohème, para nosotros, tiene algo de bálsamo y de ejemplo”, afirma la dupla creativa en el programa de la obra.
“Creo que tenemos un deseo de abrirnos a nuevos públicos. Quizás la ópera es un poco intimidante, y por eso con Julián buscamos una puesta y una actuación super natural, muy accesible, donde uno vea cosas y relaciones con la que uno pueda empatizar”, cerró Basaldúa.
Ópera para celebrar la propia historia
Esta puesta es además especial porque inaugura ni más ni menos que el 120º aniversario del Teatro El Círculo. El hecho de comenzar esta temporada en particular con una ópera honra la propia historia de la institución. “Nuestro teatro ofrece producciones de ópera completa desde hace más de 20 años en forma ininterrumpida, organizadas por nosotros y realizadas mayormente con artistas locales. Y este año es un año muy sentido para nosotros porque cumplimos 120 años de existencia, y el teatro se inauguró en 1904 con la ópera ‘Otello’”, apuntó en este sentido Martínez Carbonell.
Para quienes estén abonados, la temporada 2024 continuará con una oferta variada y de alto nivel, que incluirá ballet, recitales, varias propuestas sinfónicas, y otra ópera: a finales de octubre estrenarán “Cavalleria Rusticana”, de Pietro Mascagni, quien supo ser compañero de habitación de Puccini durante sus años de estudiantes, y quien fue parte de las vivencias que inspiraron “La Bohème”,
Finalmente, el director reconoció la importancia clave del público y la ciudadanía en la construcción continua de El Círculo como referencia de la cultura local, y en el valor social que tiene sostener una oferta cultural de calidad. “Creo que una institución cumple 120 años cuando puede sostener un sueño a través del tiempo, cuando interpreta a la gente, se aggiorna y vuelve a sorprenderla con nuevas realizaciones. Por eso somos considerados un patrimonio cultural: este carácter se construye con valores agregados a lo largo de los años y solo lo otorga la comunidad. Apostamos al arte: aquello que despierta el alma y proporciona alimento espiritual a la gente”, cerró Martínez Carbonell.