Entre las muchas postales que dejaron las recientes elecciones primarias (Paso) se destaca la que refleja que, nuevamente, las redes sociales ganaron terreno en el siempre disputado campo de la comunicación política. La clave fue la viralización —masificación— de los distintos mensajes de campaña para lograr un mayor impacto en el vínculo entre los postulantes y los ciudadanos y, en ese sentido, la herramienta que predominó fue Instagram, plataforma basada en la imagen.
Según un estudio realizado días atrás por el Observatorio de Medios de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), al que La Capital tuvo acceso, "desde que los precandidatos comenzaron la campaña proselitista para las Paso las pantallas no se volvieron a apagar".
"Flyers, fotos y videos de sus redes presentaron a los aspirantes una y otra vez en el escenario proselitista virtual, sin importar hora ni lugar. Es que la insistencia es persistencia. Cuando la producción de contenido político es un flujo que se desborda, la repetición del mensaje es la única esperanza de quedar en la memoria", resaltó el informe.
Para los profesionales de la UNR, "como en las antiguas culturas orales, donde la repetición de las palabras era el antídoto contra el olvido, la complejización de los lenguajes, las plataformas y los soportes requirió la intervención de comunicadores que fueron elaborando y viralizando los distintos mensajes de campaña para lograr un mayor impacto en la comunicación con los ciudadanos".
De hecho, las redes vienen planteando nuevos recursos: la mayoría de los postulantes ancló algún tipo de publicación en el inicio de su fan page (página web de seguidores) o de usuario en Twitter.
También se apeló con fuerza al video en vivo, que muchos de los ahora candidatos utilizaron para transmitir discursos, visitas a barrios y charlas con ciudadanos.
En ese contexto, el observatorio destacó que los aspirantes a concejal de Rosario y sus pares a diputado nacional hicieron notar su presencia en la redes.
"Entre caminatas, mucha imagen y propuestas en las que prevalecieron las consignas, los políticos sumaron recursos: a Facebook y Twitter agregaron Instagram. Por eso, las denominadas Instastories se convirtieron en la nueva incorporación del proselitismo virtual", precisó el estudio.
Acerca del uso de Instagram, el observatorio añadió: "Al ser una red social exclusiva de imágenes, muestra a los candidatos desde un lado más humano. No es que sea la condición de esa herramienta sino que los políticos así lo decidieron".
"Los postulantes se mostraron subiendo publicaciones más personales, haciendo referencia al cansancio y a la estresante situación de recorrer en muy poco tiempo la provincia y los barrios de Rosario. Y en los timelines abundaron las selfies, donde aparecieron con el equipo de trabajo y con militantes", indicó el informe.
Acerca de los cambios que introdujeron esas historias en el uso de redes para las campañas electorales, los integrantes del observatorio advirtieron que, en primer lugar, "los precandidatos no quisieron quedar afuera y las utilizaron con una estrategia y un contenido diferentes, las vincularon a la instantaneidad, al hacer ahora y a la geolocalización".
"Lejos de repetir consignas o subir fotos, los aspirantes se mostraron recorriendo barrios, charlando con los ciudadanos, exponiendo en asambleas o visitando fábricas. Si en Facebook y Twitter venían realizando un diario de campaña, a través de las historias de Instagram documentaron como un reality sus vidas en ese contexto", subrayaron.
Al alcance de la mano
Los ciudadanos, en gran medida, actualmente obtienen información a través del uso de teléfonos, hábito que fue captado y analizado desde el ámbito político.
A modo de respuesta, las redes presentaron contenidos adaptados a esos dispositivos y los precandidatos no realizaron desarrollos analíticos de sus propuestas sino que echaron mano a mensajes cortos y directos, como también a fotografías y videos.
El tipo de interacción que predominó es el "me gusta", luego "compartir" y, en última instancia, el comentario, señaló el observatorio. En el caso de Facebook, que recientemente incorporó las reacciones, los usuarios utilizaron mucho el "me encanta" y el "me enoja" para adherir o no a las publicaciones.
Incluso, durante la veda electoral algunos precandidatos dejaron un tuit o un posteo en Facebook fijado para sus seguidores.
Respecto del día de elecciones, el observatorio constató que "las publicaciones fueron muy similares: los precandidatos se mostraron emitiendo su sufragio, algunos convocaron a votar y, en muchos casos, utilizaron las redes para mostrar adhesiones y apoyo".
Además, la mayoría de los postulantes realizó publicaciones informales, haciendo vida en familia y algunos compartieron temas musicales", añadió el estudio.
Más tarde, con los resultados en estado de difusión, algunos precandidatos también usaron las redes para manifestarse en ese sentido.