Personal policial detuvo este miércoles a Brian Nihuel M., alías Chamaco, quien está sindicado como uno de los asesinos de Bruno Barrios, el joven acribillado en julio del año pasado en el barrio La Lata cuando iba a encontrarse con una chica. La detención se produjo en el marco de dos allanamientos llevados adelante en la zona sur de Rosario.
Uno de los allanamientos se realizó en el barrio Tablada, en los Fonavi de la calle Alzugaray al 700, donde personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), con la colaboración del Grupo Táctico G.O.T, de la policía de Santa Fe, detuvo al prófugo, quien se encontraba con su novia.
Al escuchar el ingreso de la policía, Brian Nihuel M. intentó descartar dos teléfonos por la ventana, lo que fueron recuperados y puesto a disposición de la policía.
La noche del 26 de julio del 2022 Bruno se subió a la moto de un vecino que había ofrecido llevarlo a su casa. Sin embargo, ambos desconocían que había un grupo de delincuentes que querían matar al conductor. El chico de 18 años quedó en medio de la balacera y murió de un disparo en la cabeza. El conductor de la moto salió ileso del ataque.
Bruno Barrios volvía caminando a su casa el pasado 26 de julio y se encontró con un amigo que lo acercó en moto. En ese regreso, cuando iban por Paraguay y Nora Lagos, dos jóvenes los atacaron a tiros. Bruno recibió un disparo en la cabeza y murió. El chico era mozo en el bar Bogar (de Santa Fe y Presidente Roca) y sus familiares y vecinos participaron en agosto de una marcha al Centro de Justicia Penal para plantear que las balas no eran para él, sino que tenían como blanco al conductor de la moto. Para la Fiscalía, uno de los que disparó esa noche era Sebastián Horacio G., quien en septiembre del año pasado fue imputado y quedó en prisión preventiva por dos años.
“Sebastián G. y un menor de edad se pararon en el medio de la calle, ambos portando armas de fuego, y efectuaron las detonaciones”, plantea la imputación. Barrios recibió una herida en la cabeza y el conductor de la moto se fue ileso por Paraguay hacia el sur.
Un vecino se acercó al pasillo donde vive la familia de Bruno en una casa que tiene en el frente una imagen del Gauchito Gil, a la altura del 3100 de la misma calle, y avisó que el chico de 18 años estaba tirado en el asfalto. Llegó una ambulancia del Sies y los médicos constataron que el joven había muerto.
En ese momento la madre de Bruno, Marcela L., contó a la policía que el chico había salido para encontrarse con una chica y un rato después se enteró de que lo habían matado a dos cuadras. “No tenía problemas con nadie”, remarcó. Días después, los allegados al chico repitieron la misma frase durante una marcha que realizaron hasta el Centro de Justicia Penal para reclamar el esclarecimiento del caso.
>> Leer más: Un imputado por el homicidio de Bruno Barrios, baleado con un tiro que no era para él
>> Leer más: Una discusión, antesala del asesinato de un joven en barrio La Lata
“Era un chico magnífico y muy bueno, por eso lo mataron. Se subió a la moto de un amigo que lo acercó hasta mi casa y con ese pibe era el problema. A él lo buscaban”, contó la madre del joven. Bruno trabajaba en un bar de Santa Fe y Presidente Roca, cursaba el último año de la escuela secundaria y tenía ganas de presentarse en la escuela de Gendarmería Nacional para ser gendarme como un familiar suyo.
La noche en que lo mataron, según contó la familia, Bruno se fue a encontrar con una amiga y comieron hamburguesas en un local de la avenida Pellegrini. Luego de unas horas, Bruno llegó a su casa y volvió a salir para acompañar a su amiga a la casa. Al despedirse, la adolescente le sacó la última foto a Bruno. Fue alrededor de las 23, poco antes de que lo mataran.
Por esta causa, ya está detenido Sebastián Horacio G. de 21 años, quien fue atrapado el 25 de agosto en Pasaje Dos Hermanas al 4200, casi un mes después del asesinato. Al momento de la detención se le secuestró una pistola Bersa 9mm. Desde entonces se buscaba a “Chamaco”, otro de los autores del brutal crimen y quien habría tenido diferencias con el conductor de la moto en la que viajaba Bruno.
El juez Pablo Pinto dictó esa medida en una audiencia realizada este mediodía en el Centro de Justicia Penal. El fiscal Gastón Avila imputó a G. como coautor de un homicidio agravado por el uso de arma y la tentativa de homicidio del amigo de la víctima, además de la portación ilegal de un arma de fuego.
>>Leer más: Quería ser gendarme y lo mataron con una bala que no era para él