Cuando empezaron a trabajar, los integrantes de Manos Solidarias Rosario se propusieron que las personas en situación de calle reciban al menos una comida al día. Y el próximo viernes, irán por un objetivo mayor: llegar con supremas de pollo, un pan dulce y un budín a las 700 personas que asisten a diario. Será durante la última ronda del año de los voluntarios que recorren tanto el centro como el norte, el sur y el oeste de la ciudad. Buscan socios que puedan colaborar con esta movida.
Manos Solidarias se presenta como una agrupación de "ciudadanos comunes, sin bandera política ni religiosa, unidos con el único objetivo de dar una mano a una parte olvidada de nuestra sociedad: la gente en situación de calle". Desde 2016 recorren todas las tardes los espacios públicos del centro, el norte, el sur y el oeste de la ciudad con sus carros donde cargan ollas enormes y botellas de jugo o agua fresca.
Y no sólo reparten alimentos: conocen a cada persona por su nombre, los ayudan a hacer trámites, les alcanzan mantas y ropa o calzado durante el invierno. Todo, a fuerza de voluntad y convicción, en medio de un contexto económico y social que hace esos gestos cada vez más necesarios.
"En las recorridas nos damos cuenta que la gente que duerme en la calle es cada vez más. Y también empezamos anotar este año que hay muchas personas que no llegan a fin de mes y nos esperan con el tupper cuando pasamos a repartir la comida", asegura Cristina Peralta, una de las mujeres que cocinan para cada una de las rondas de Manos Solidarias.
Cristina se sumó a la agrupación este año, pero el movimiento existe desde 2016 cuando un grupo de jóvenes empezó a hacer las rondas en el macrocentro de la ciudad. Actualmente sostienen cinco cocinas y 15 rondas que cruzan toda la ciudad para llegar a unas 700 personas.
Cristina cocina todos los martes par la ronda que recorre la peatonal Córdoba. Una vez por semana prepara unas 90 raciones que carga en el auto y lleva hasta Córdoba y Oroño. Allí se encuentra con los voluntarios que reparten los alimentos. Algunas noches, dice, tiene que preparar raciones extra porque lo que llevan no alcanza.
>>Leer más: Ayuda alimentaria: el municipio rosarino refuerza partidas de cara a fin de año
Cada una de estas rondas mide el peso de la crisis social que atraviesa el país. "Por ahí quienes no recorren el centro de noche no lo ve, pero nosotros que estamos repartiendo la comida nos encontramos con familias enteras durmiendo en la calle. Sólo en la plaza San Martín llegamos a repartir 20 viandas. Hay personas grandes y mujeres con varios niños", cuenta Cristina.
La última ronda del año
El próximo viernes 26 de diciembre, Manos Solidarias celebrará la última ronda del año. Y para que no pase desapercibida quieren llevar un budín y un pan dulce a las personas que acompañaron a diario. "Las fiestas son momentos duros para quien vive en la calle, pro eso queremos hacer algo diferente", dice la mujer.
Si bien ya muchos particulares sumaron donaciones, aún necesitan budines y pan dulce para llegar a todos. Las personas que puedan colaborar pueden escribir a sus redes sociales (en Insragram @manossolidariasrosario y en Facebook Manos solidarias Rosario . También se puede transferir al alias ronda2025msr.