Persisten las dudas entre los carreros
"No estamos en contra de la ordenanza, pero la prioridad tienen que ser las personas y no los animales. Porque si con ocho hijos me quedo sin el carro, con una mano atrás y otra adelante, me obligan a convertirme en un delincuente", afirmó Carlos Mieres.
18 de julio 2011 · 01:00hs
"No estamos en contra de la ordenanza, pero la prioridad tienen que ser las personas y no los animales. Porque si con ocho hijos me quedo sin el carro, con una mano atrás y otra adelante, me obligan a convertirme en un delincuente", afirmó Carlos Mieres, líder de la Cooperativa de Cartoneros de Empalme Graneros, la más numerosa de la ciudad.
Desde Vía Honda, Claudia Báez señaló que "los carros no se pueden sacar de un día para el otro". Pero lo cierto es que el director de Control Urbano, David Sánchez, confirmó que el 26 de julio próximo comenzarán a elaborar el Registro de Recuperadores de Residuos que utilizan los vehículos tirados por caballos, medida que incluye la colocación de un microchip en el animal.
Las autoridades de la repartición vienen manteniendo reuniones periódicas desde la aprobación en diciembre pasado de la ordenanza que estipula no sólo el registro sino también la desaparición, en un lapso de tres años, de los carros traccionados a sangre.
Interrogantes. Si bien los carreros no se manifestaron en contra de la normativa, sí plantearon sus preocupaciones.
Mieres tiene 47 años y ocho hijos. Fue portuario hasta que por un accidente laboral tuvieron que amputarle una mano. Desde entonces, como la pensión no alcanza, se dedica al cirujeo y junta unos 1.500 pesos "si el mes viene bien".
Está al frente de la cooperativa que agrupa a los 428 carreros de Empalme Graneros, la más numerosa de la ciudad.
Un planteo similar hizo Báez. "El cirujeo no se termina de un día para el otro, porque la única forma en que la gente deje el carro es si le ofrecen un microemprendimiento importante", dijo.
Para Luis Borghi, de la zona norte, el principal miedo "es que no dejen trabajar".
Por ahora el carro y el caballo son su único medio de subsistencia. "Nadie nos ofreció otra cosa", alertaron.