El ex titular de la Afip Ricardo Echegaray llegó hasta la Corte Suprema con un “recurso extraordinario” en el que persigue un fallo que diga que la diputada oficialista Elisa Carrió mintió cuando lo llamó “ladrón”.
El ex titular de la Afip Ricardo Echegaray llegó hasta la Corte Suprema con un “recurso extraordinario” en el que persigue un fallo que diga que la diputada oficialista Elisa Carrió mintió cuando lo llamó “ladrón”.
La Sala G de la Cámara Civil hizo lugar a un recurso de apelación presentado por Echegaray, nuevo titular de la Auditoría General de la Nación, y elevó las actuaciones a la Corte, que deberá comenzar a tratar el tema después de la reanudación de la actividad judicial tras la feria estival, que concluyó ayer.
En tanto, Carrió anunció que pedirá la próxima semana al director de la Afip, Alberto Abad, “una auditoría interna” sobre la gestión de su antecesor como “paso previo” a la denuncia por presunto “enriquecimiento ilícito” que prepara contra el actual titular la Auditoría General de la Nación (AGN).
Echegaray llegó hasta la Corte Suprema con un “recurso extraordinario” pese a que en septiembre pasado la Cámara había rechazado una “acción declarativa” que presentó el ex funcionario “con la finalidad de que se declare que las expresiones vertidas en su contra en un programa televisivo son inexactas y falsas”. Echegaray “aclaró que no perseguía ningún tipo de condena ni propósito resarcitorio sino la publicación de la sentencia en medios de importante difusión (asumiendo incluso su costo), ya que esta es la única vía con la que cuenta en defensa de sus derechos constitucionales lesionados, frente a la inmunidad de que goza la contraparte”.
Pero en dos instancias, la Justicia hizo prevalecer la inmunidad de que goza Carrió como diputada nacional. “No es materia de controversia que los dichos en cuestión vertidos por la legisladora en un programa televisivo se encuentran alcanzados por la referida inmunidad parlamentaria”, habían resuelto los jueces Beatriz Areán, Carlos Bellucci y Carlos Carranza Casares.
“Nuestra Ley Suprema impide que un miembro del Congreso de la Nación pueda ser acusado, interrogado judicialmente, ni molestado por las opiniones o discursos que emita desempeñando su mandato de legislador”, recordó el fallo.
Echegaray apeló la resolución y el tribunal resolvió que “ante la naturaleza de la cuestión federal debatida, toda vez que se ha cuestionado la inteligencia de cláusulas de la Constitución nacional, cabe admitir la procedencia formal del remedio en examen y concedió el recurso extraordinario interpuesto”.