El padre del policía Leonardo Caro estaba al lado de su hijo cuando un asaltante
le efectuó un disparo a la cabeza en medio de un robo frustrado a una agencia de autos. Durante más
de tres horas, en un relato entrecortado por el llanto, el hombre declaró ayer en el juzgado que
investiga el crimen del agente de 23 años. En un testimonio detallado y considerado clave dijo que
podría reconocer "con absoluta seguridad" a dos de los atacantes y, con menor certeza, al tercer
ladrón que entró al local.
Antonio Caro declaró ayer desde las 9 a las 12 en el juzgado de Instrucción Nº
9, a cargo de Javier Beltramone. Hoy será indagado allí Sergio Damián V., un hombre de 28 años
detenido el domingo tras ser buscado durante cinco días por la policía. También indagarán a un
tercer detenido, Alberto R., de 31 años, quien está acusado de encubrimiento agravado por intentar
brindarle alojamiento a un sospechoso que está prófugo.
El mismo delito. Fuentes del caso señalaron que a Sergio V. le formularán la
misma imputación que el jueves afrontó el otro detenido, Luciano V., de 27 años, quien entonces se
abstuvo de declarar. Fue arrestado el mismo día del ataque y la policía presume que es el único
integrante de la banda que huyó a pie del lugar. Los otros escaparon en un Ford Escort.
La imputación es por homicidio triplemente calificado: por la alevosía, por la
condición de policía de la víctima y por haber cometido el crimen al no poder consumar el robo
previo o en busca de impunidad. Una acusación que no deja otro margen que la prisión perpetua en
caso de condena y que encaminaría la causa hacia un juicio oral.
Aún no está precisado qué tramo del ataque será achacado a cada uno de los
acusados y si alguno de ellos fue el autor material del disparo. La policía cree que el homicida
podría ser Sergio V., el hombre que hoy puede declarar o guardar silencio ante el juez.
En la causa aún deben declarar clientes y empleados de la agencia que
presenciaron el crimen. Restan pericias balísticas y la detención de dos sospechosos. Uno de ellos
fue señalado por el padre de la víctima en un álbum policial.
Sin explicación.En el detallado testimonio que el prestó ayer, Caro dijo que a
dos de los agresores podría reconocerlos "con absoluta seguridad", según indicaron fuentes del
caso. Con menor certeza, planteó, podría señalar al tercer asaltante que entró al local de
Pellegrini al 5500 donde él y su hijo pretendían comprar un auto usado, el martes pasado.
Caro estaba al lado de su hijo cuando le descerrajaron a corta distancia un tiro
a la cabeza, por el que murió al día siguiente. Le tiraron porque en medio del atraco se le cayó la
pistola reglamentaria 9 milímetros, que había intentado esconder al iniciarse el asalto.
El padre de la víctima señaló que, según su impresión, los ladrones notaron que
su hijo era empleado policial por el calibre del arma y su corte de pelo. Pero en medio de un
llanto incontenible, no pudo dejar de expresar lo "incomprensible" que le resulta el ataque. Su
testimonio es considerado "medular" en la causa.
Con el prófugo. En tanto, el fin de semana fue apresado en la zona sudoeste
Alberto R. por encubrimiento agravado. De acuerdo con la acusación, habría intentado brindarle
alojamiento en la vivienda de un amigo a un hombre prófugo por el caso. La maniobra fue advertida
por la esposa del dueño de casa, quien llamó al Comando Radioeléctrico. R. fue apresado en la
vereda y el fugitivo logró escabullirse.