Siete hombres, entre ellos un menor de 17 años, fueron detenidos ayer a la tarde
luego de que sorprendieran a dos mujeres que habían retirado minutos antes unos 20 mil pesos de un
banco. El grupo, que iba repartido en dos auto, estaba conformado por cuatro ciudadanos chilenos y
dos argentinos, éstos últimos con domicilio en Mendoza. Los ladrones fueron capturados durante un
operativo cerrojo efectuado por el Comando Radioeléctrico que tuvo su punto culminante en cercanías
de la avenida de Circunvalación y la autopista a Santa Fe, cuando uno de los rodados intentaba
salir en dirección al norte y el otro buscaba ingresar hacia el centro de la ciudad.
Los ahora detenidos implementaron un ingenioso ardid para apoderarse del dinero,
pero no tuvieron en cuenta la cantidad de testigos que había en la calle. Los investigadores
sostenían anoche que uno de ellos pudo haber estado en el interior del banco y haya sido quien
"marcó" a las víctimas.
A esa conclusión preliminar llegaron al hallar dentro de uno de los autos un
conjunto de ropa "de vestir" de buena calidad (un saco, camisa blanca, corbata y pantalón). "Al
parecer había uno que empilchaba bien, se metía al banco y luego salía y les mercaba las víctimas a
sus cómplices, quienes hacían el trabajo", contó a este diario una alta fuente policial.
Mujeres engañadas. Todo sucedió minutos después del mediodía de ayer. Nora Di
Benedeto, de 66 años, y su hija Inés María Pozzi, de 36, son suegra y cuñada, respectivamente, del
juez de Instrucción Nº 9 de los Tribunales provinciales, Javier Beltramone. Las mujeres retiraron
18 mil pesos en efectivo de la sucursal del Banco Galicia de Eva Perón al 7800, en pleno barrio de
Fisherton, y antes de salir se repartieron el dinero entre ellas: una guardó 7 mil pesos y la otra
los 11 mil restantes.
Después ascendieron al mismo auto en el que habían llegado, un Suzuki Fun con el
que comenzaron a circular en dirección al este, es decir hacia el centro de la ciudad.
Cuando llegaron al 5400 de Eva Perón, las mujeres tuvieron que detenerse por la
luz roja del semáforo. En ese momento apareció un Chevrolet Corsa color blanco con dos o tres
ocupantes. "Señora, tiene un neumático pinchado", dijo el hombre que iba en el lugar del
acompañante. Entonces, las mujeres estacionaron sobre la derecha, pegado al cordón. El otro
vehículo también se detuvo un poco más adelante, y la misma persona que había advertido el problema
se ofreció a cambiar la rueda.
En eso estaban, cuando unos segundos después arribó otro Chevrolet Corsa, pero
gris, del cual bajaron dos o tres hombres que fueron directamente hacia las damas para quitarles
los bolsos donde estaban los billetes. Allí se produjo un forcejeo que concluyó con los ladrones
haciéndose del dinero. Toda esa acción tuvo varios testigos. Vecinos del lugar y las propias
víctimas se comunicaron de inmediato con la policía.
Datos clave."Varios testigos hasta llegaron a tomar los números de las patentes
de los Corsa", confió una fuente policial. Un dato muy interesante y que llamó la atención a más de
un pesquisa fue que los dos autos tenían, en sus matrículas, las mismas letras, pero en diferente
orden (HGW 494 y HWG 527). Varias patrullas del Comando Radioeléctrico comenzaron a peinar la zona
en busca de los vehículos sospechosos.
El primer vehículo fue detectado cuando se desplazaba por Circunvalación, a la
altura de Juan José Paso. Era el Corsa gris en el que iban dos hombres. "Allí comenzó una
persecución. El auto viajaba como en busca de la autopista a Santa Fe. Al llegar al Camino de los
Granaderos encaró como para reingresar a la ciudad, pero a unos 300 metros se lo detuvo", consignó
a LaCapital un vocero del Comando. En ese coche iban dos hombres de nacionalidad chilena cuyas
identidades no fueron dadas a conocer. Dentro del auto la policía secuestró un saco, una camisa
blanca y un pantalón además de 5 mil pesos en efectivo.
A todo esto, otra patrulla del Comando interceptó al segundo vehiculo cuando
circulaba por una calle colectora de Circunvalación e intentaba acceder a la autopista, a pocos
metros del hipermercado Makro. En ese coche viajaban cinco hombres, dos chilenos y tres argentinos.
Entre éstos últimos había un menor de edad y todos eran oriundos de la provincia de Mendoza. A
estas personas la policía les incautó poco más de 12 mil pesos.
Las fuentes consultadas anoche indicaron que en ninguno de los dos casos hubo
resistencia y que en poder de los sospechosos no se hallaron armas de fuego.
De visita
El grupo de mendocinos y chilenos apresado llegó a Rosario a principios de esta
semana. Viajaron en los mismos autos en los que andaban ayer y se habían alojado en una casa
amoblada de la zona oeste que alquilaron en forma temporal por un aviso clasificado. El menor que
los acompañaba es sobrino de uno de los adultos de Mendoza.