A 20 años de la muerte de Lady Di, el príncipe Harry contó como superó la ausencia
"Mi forma de abordarlo fue metiendo la cabeza en la tierra, negándome incluso a pensar en mi madre'', dijo sobre su adolescencia a la que definió como "un caos total".
17 de abril 2017 · 12:34hs
A 20 años de la muerte en un accidente de tránsito de la princesa Diana de Inglaterra, su hijo menor, Harry, se sinceró en una entrevista con el diario The Daily Telegraph y confesó que estuvo a punto de sufrir varias crisis nerviosas y que necesitó terapia para sobrellevar el dolor.
Durante casi 20 años "bloqueé todas mis emociones y estuve muy cerca de un colapso nervioso en numerosas ocasiones'', según dijo al diario.
Harry describió el largo proceso de negarse a afrentar su sentimiento de pérdida, que terminó a sus 20 años, cuando buscó ayuda profesional para lidiar con la presión y la infelicidad.
"Mi forma de abordarlo fue metiendo la cabeza en la tierra, negándome incluso a pensar en mi madre, porque ¿por qué iba a ayudar eso?'', dijo sobre su adolescencia y los años posteriores, un periodo en el que comenzó una carrera militar y en el que ocasionalmente protagonizó titulares no deseados, especialmente tras ser fotografiado jugando al billar desnudo en Las Vegas.
También contó que en ocasiones se sintió "con ganas de golpear a alguien" y que empezó a practicar el boxeo para desahogar su agresión interna. La larga supresión de su duelo desembocó en "dos años de caos total", apuntó.
Harry explicó que aparentó que su vida era estupenda hasta que empezó la terapia y se enfrentó a sus problemas. "De pronto, todo ese dolor que nunca había procesado comenzó a salir al frente, realmente hay un montón de cosas aquí que tengo que tratar", dijo.
El hijo menor de Diana y Carlos relató a su entrevistadora que ahora está bien y elogió a su hermano por ayudarlo a buscar ayuda tras muchos años sufriendo en silencio.
Junto al príncipe William, Harry trabaja con una ONG que promueve la salud mental. Defienden que los problemas de esta índole deberían tener la misma prioridad que otras enfermedades y deben contarse abiertamente, sin estigmas.
El menor de los hijos de Lady Di no había hablado nunca en público de sus problemas para afrontar la muerte de su madre.
