Por Pedro Squillaci
Todo arranca en el paisaje patagónico de Lago Místico. En medio del frío y las montañas, un tipo sale corriendo con una niña en brazos al costado del río. Y habrá una fotógrafa aficionada que le sacará, una, dos, varias fotos.
Pronto ella descubrirá sangre en su pantalón, el hombre (Federico Amador) se va en un auto en plan fugitivo hasta que Luciana (Calu Rivero), la tan mentada fotógrafa, descubre que hay una mujer asesinada, que no es otra que la pareja del que huyó con la nenita.
Desesperada saldrá a pedir ayuda y se topará con Vito (Esteban Lamothe), una persona oscura, que promete ayudarla.
La acción se traspolará rápidamente a 14 años después, quizá demasiado veloz el cambio para el registro del televidente. Luciana ya está en pareja con Vito, que es socio de los negocios turbios del papá y la mamá de Luciana, y por esas cosas de la vida, o del guión forzado, una firma puesta en una propiedad comprada ilegalmente hará que quien fuera una aprendiz de fotografía hoy tenga que hacer una probation como docente en una escuela nocturna para no ir a la cárcel. ¿Es mucho? Sí, muchísimo, pero se ve que no había otra manera de enganchar un encuentro casual con Luis (Amador), que ahora se hace llamar Omar y que trata por todos los medios de ocultar el pasado de su vínculo con su mujer y qué ocurrió en verdad con su muerte.
La historia de amor tendrá una protagonista y dos pretendientes. El primero es uno que parecía bueno y es un villano (Lamothe) y el segundo es uno que asomó como villano pero quizá sea el héroe de la tira (Amador).
Hay un tratamiento visual cuidado, sobre todo en el inicio filmado en la Patagonia, y una trama que apunta a tocar el corazón de la gente desde un policial. Algo que ya se vio en el mismo canal con "Amar después de amar" (ADDA), donde también estaba Amador, aunque esa tira era superior no sólo en las imágenes sino también en la dinámica y los saltos temporales.
Incluso aquí también hay una historia paralela para seguir en la web de Telefe llamada "La otra cara de Rita", enfocada en el derrotero y la venganza de Rita (Bárbara Amaral), la hermana de Iracema (Lola Banfi), que no es otra que la mujer asesinada. Sorprende que los textos del personaje de Rita, que es brasileña, salgan subtitulados, aunque es más que loable la decisión para que se entienda bien todo lo que ella dice. Y de paso, es un aperitivo para la novela que sigue "Verdades secretas", que no está subtitulada sino doblada, pero que también es brasileña y tuvo un buen arranque
Desde ya que toda la tensión sexual la acapara Calu Rivero, en el rol de una mujer que busca protección, que tiene un pulso artístico por explotar y que la vida la sorprende, primero con una tragedia y, como una ramificación de ese suceso, el encuentro de un amor que apunta a tener esa mixtura de prohibido, pasional y secreto que tanto seduce al televidente.
Habrá que ver cuál será la suerte real de esta tira cuando el año siga su curso y tenga una competencia fuerte enfrente. Por lo pronto, que suenen las campanas.
"¿Cuál será la suerte de esta tira cuando tenga una competencia fuerte enfrente? Por lo pronto, que suenen las campanas"
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