Según estimaciones realizadas por el gobierno de Santa Fe, circulan en la provincia poco más de 900 mil armas, una cada cuatro habitantes. Así lo indicó Joel Theytaz, director de la Agencia Provincial de Violencia con Armas de Fuego (Apvaf), a quien La Capital contactó para profundizar sobre datos suministrados por la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac, ex Renar).
De acuerdo al organismo nacional, en Santa Fe hay registradas poco más de 170.105 armas. Dado que ese número corresponde exclusivamente al circuito legal, se consultó al funcionario sobre cuántas había en todo el territorio provincial, sumando las que se movían informalmente.
Theytaz sostuvo que por cada arma registrada "estimamos que hay entre cuatro y cinco ilegales". Dicha aseveración plantea un escenario donde circularían informalmente en la provincia 765.472 armas, que sumadas a las 170.105 legales totalizarían unas 935.500.
El diagnóstico oficial genera así un empeoramiento de las estimaciones realizadas por el ex ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro, quien en una entrevista con La Capital de 2017 había aseverado que por cada arma legal calculaba entre dos y tres ilegales.
"Somos más pesimistas", reconoció Theytaz, quien argumentó su posición "teniendo en cuenta la cantidad de secuestros que realizamos a diario". La Casa Gris viene consignando cifras récord en la materia: a principios de este año un parte oficial indicaba que entre 2019 y 2021 se incautaron 9.882 armas, lo que arrojaba un promedio de 9 por día.
Según precisó el funcionario, en la gran mayoría de los casos se secuestran armas cortas: "Lo que más se incauta son calibre 22, seguidos por 9 milímetros. En el centro norte, en tanto, hay más presencia de armas largas", detalló.
A renglón seguido, el funcionario dijo que si bien hay mayor cantidad de armas circulando, no necesariamente ello tiene que ver con la violencia urbana. "Previo a la ley de armas (NdR: se sancionó en la década de 1970), uno se podía comprar un arma en la ferretería. Lo que estamos recabando es que hay mucha gente que tiene un arma originalmente adquirida por su padre o su tío, que jamás se había registrado", afirmó.
La Apvaf viene trabajando con las nuevas autoridades de Anmac en la regularización, que van de la mano con recurrentes operativos de destrucción de armas. El último de ellos ocurrió a principios de junio, donde un quinto de las 10.000 armas destruidas por el ente nacional correspondían a Santa Fe.
Tanto a nivel provincial como nacional se encargan de destacar que existe una sintonía respecto a la política de armas, en contraposición a lo que sucedía durante la presidencia de Mauricio Macri. “Estamos reactivando una política interrumpida por el gobierno anterior, destruyendo armas del delito, secuestradas gracias al trabajo articulado con los gobiernos de las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén y Santa Fe. Es la realidad concreta de las políticas de control de armas, de prevención de las violencias y la persecución del delito”.
Durante 2021 se produjo una cifra récord de trámites vinculadas a la solicitud de credenciales de Legítimo Usuario Individual de Armas de Fuego (CLUSE), que es uno de los principales indicadores respecto a la regularización. A partir de un acceso a información pública solicitado por este medio, desde Anmac detallaron que el año pasado se habían registrado 8.429 solicitudes, más del doble de las de 2020 y 60% más que en 2019.
"El incremento proporcional reflejado en las cifras del año 2021 se condicen con la convocatoria a regularización y renovación de la CLUSE, cuyos vencimientos y plazos se habían encontrado prorrogados por la Disposición DNRyD ANMaC 1/2020 y sus modificatorias, en atención a la situación sanitaria impuesta por la pandemia. Luego, conforme las Resoluciones 96/2021 y 115/2021 ANMaC, se estableció un nuevo cronograma de vencimientos, instando a los usuarios/as vencidos/as a regularizar su situación administrativa", explicaron desde la repartición nacional.