Como los viejos discos de vinilo las historias, sobre todos las que rozan el mundo del narco, suelen tener un lado A y otro B. En el lado A de aquellos viejos discos sobresalían los temas más importantes. Los de mayor peso. Lo que no desmerecía a los del B. Pero no solían tener tanta potencia, sobre todo comercial.
Lado A: Ocho familiares y allegados al narco ecuatoriano José Adolfo “Fito” Macías, líder de la organización narcocriminal “Los Choneros”, fueron detenidos en Córdoba y en un proceso express fueron deportados la madrugada de este viernes a Ecuador.
Lado B: Fueron deportados ocho familiares y allegados del narco Fito Macías quienes habían ingresado al país de manera legal, como al menos otras cinco veces. Se movían con sus nombres y apellidos. No ficcionaron vidas. Argentina los expulsó tras cancelarles la residencia transitoria a pedido del gobierno de Ecuador. Tanto en el Lado A como en el B quedó claro que no hubo una investigación criminal detrás de “la caída” de los parientes del narco.
Fito Macías es uno de los villanos del momento. Continentalmente hablando su nombre saltó a la opinión pública el pasado domingo 7 de enero cuando se fugó de la Cárcel Regional de Guayaquil horas antes de ser trasladado a una prisión de máxima seguridad. Tiene 44 años y 14 procesos judiciales por distintos delitos como robo, delincuencia organizada, tenencia de armas y asesinato.
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Purgó 12 años de una condena a 34 años de prisión. Su fuga desencadenó una serie de hechos violentos y conmocionantes, como la toma por parte de presos de seis cárceles en la que secuestraron a guardiacárceles y un caos generalizado de violencia en las calles, que llevaron al presidente de Ecuador, Daniel Noboa, a declarar al país en estado de “conflicto armado interno” por dos meses para combatir el crimen organizado.
Fito Macías
Los Choneros desde hace 25 años son parte de la escena del crimen organizado de Ecuador. Se estima que tienen un ejército de al menos 12.000 miembros. Detenido en 2012 y sentenciado a 34 años de prisión por narcocriminal y asesino, Fito se fugó en 2013 junto a 15 compinches, entre ellos Jorge Luis “Rasquiña” o “JL” Zambrano, por entonces líder de Los Choneros. Seis meses más tarde fue recapturado. Rasquiña murió asesinado a balazos el 28 de diciembre de 2020 y Fito alcanzó la cúspide. Muerto el Rey. Viva el rey.
Sobre el paradero de Macías no hay certezas. Estiman que puede estar escondido en Colombia, Perú o vaya a saber uno.
De acuerdo al Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado tendría vínculos con los carteles de Sinaloa; con Los Gaitanistas (también conocidos como Clan del Golfo, Urabeños y Autodefensas Gaitanistas de Colombia, el mayor exportador de cocaína del mundo; y organizaciones ubicadas en los Balcanes.
Para cuando Fito Macías ganó las calles nuevamente, su esposa, Inda Mariela Peñarrieta Tuarez, una enfermera de 48 años; tres de sus hijos —Michelle, de 21 años, Ilse María, de 12, y Lian Sejam, de 4—; su sobrino Javier Macías Alcivar; la empleada doméstica, Denny Yadira Laines Basurto; y Ángel Zambrano Chiquito, amigo de la familia estaban instalados a unos 5 mil kilómetros de Guayaquil.
Habían comprado una casa grande sin lujos excesivos en el country Valle del Golf de Malagueño, ubicado a metros de la autopista Córdoba-Villa Carlos Paz, a 15 minutos de la ciudad de Córdoba. El barrio cerrado tiene 347 hectáreas. La mitad son espacios verdes.
El lugar comenzó a comercializarse en 2006 teniendo como nave insignia el campo de golf de 18 hoyos diseñados por el estadounidense Jack Nicklaus, considerado como uno de los mejores golfistas de la historia.
Ninguna de las personas relacionadas con el narco Macías habían cambiado sus nombres ni ficcionado sus pasados. No tenían ningún impedimento para entrar a Argentina. No pesaba sobre ninguno alertas rojas de Interpol.
De hecho, según trascendió, entraron y salieron al menos cinco veces desde agosto del año pasado. Viajaron en septiembre, octubre, noviembre y enero. No realizaron ninguna triangulación extraña para ingresar al país. No tenían auto propio y se movían en remises.
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¿Un narco de este calibre enviaría a su familia a un lugar donde no tuvieran una mínima cobertura o contención? Una fuente consultada recordó que en varias investigaciones federales realizadas en el centro del país han trascendido vinculaciones del crimen organizado local con carteles mexicanos.
Días antes de ser asesinado el periodista y candidato presidencial Fernando Villavicencio denunció públicamente que había recibido amenazas de muerte por parte de Fito Macías y lo identificó como un dirigente del Cartel de Sinaloa. Villavicencio fue asesinado a balazos tras un mitin político en Quito el pasado 9 de agosto.
La casa en el barrio cerrado la compraron en dólares y efectivo. En los papeles la pusieron a nombre de una sociedad que integraban Peñarrieta Tuarez y su hermano.
El viernes 5 de enero la familia de Fito vivía en el country. “Aparentemente la operación se realizó mediante un boleto de compra y venta certificado por escribano. Un contrato entre privados y nada más. Una operatoria poco clara que da para pensar en muchas cosas”, explicó una fuente. ¿Nadie se percató que un residente extranjero movió una ponchada de dólares para comprar una propiedad en un barrio cerrado en el país?
El dato
Según con quién se hable la investigación comenzó de una manera u otra. Desde la policía cordobesa afirmaron que tres días atrás les llegó un “mensaje anónimo” que alertaba que “los vecinos del country no estaban felices con los nuevos vecinos”.
Eso motivó que realizaran una breve pesquisa en la que los identificaron y el jueves por la noche procedieron a notificarlos que debían irse del lugar. No hay registro fílmico o fotográfico en el que se vea a uno de los ecuatorianos esposados.
La otra versión es que, a partir de los contactos realizados por la ministra de Seguridad de Nación, Patricia Bullrich, desde la Justicia de Ecuador pasaron el dato de que la familia del narco estaba en Córdoba y que no sería extraño que Fito Macías quisiera visitarlos. Ese dato comenzó a ser trabajado por la Policía Federal Argentina (PFA) y la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar).
En concreto, el jueves al caer la noche, la federal y la cordobesa se desplegaron sobre el barrio cerrado, helicóptero incluido. Como no había delito que imputarles recurrieron a un tecnicismo. Desde la Dirección Nacional de Migraciones cancelaron el permiso de ingreso provisorio a Peñarrieta Tuarez y sus tres hijos y el resto pidió marcharse junto a la familia de Macías.
Armaron sus bolsos y fueron expulsados del país. Entre que comenzó el operativo y el grupo de los ocho aterrizó a bordo de un avión de la Fuerza Aérea Argentina que voló hasta la Base Aérea Simón Bolívar de Guayaquil pasaron menos de 20 horas.
Otro detalle. Peñarrieta Tuarez había tenido una causa por lavado de activos que no prosperó y fue sobreseída en una causa que derivó en el procesamiento por corrupción de los jueces y fiscales que intervinieron en ese proceso.
Este miércoles el fiscal ecuatoriano César Suárez, que estaba a cargo de la Unidad Nacional de Investigación de Delincuencia Organizada Transnacional e investigaba la toma del canal de televisión pública TC, fue ejecutado a balazos cuando circulaba por el norte de Guayaquil.
Este viernes el diario ecuatoriano El Universo precisó que un día antes de su muerte Súarez había pedido un reporte sobre la situación legal de la esposa de Fito para conocer si tenía procesos pendientes o investigaciones abiertas.