Aunque la arremetida del final puede tapar el bosque, Newell's cayó feo, mal, ante All Boys. Fue 2 a 1 en lo estrictamente futbolístico y fue goleada en otros aspectos. El equipo de Martino dejó el invicto en el torneo en la fecha 16ª y aunque la derrota de Vélez lo deja igual a 3 de la punta, los rojinegros penan por el otro saldo. Maxi Rodríguez y el Gringo Heinze dejaron la cancha con lesiones, Martino y Pautasso fueron expulsados, y la línea de juego quedó diluida bastante ante un ordenado equipo de Floresta que le jugó inteligentemente.
Los goles fueron de Jonathan Ferrari, con un cabezazo a los 11, y Mauro Matos, de penal a los 74 tras una chambonada de Guzmán. El descuento fue de Pablo Pérez, a los 90.
El partido tuvo buen arranque, con pareja vocación ofensiva de los dos. La cancha rápida, por la cantidad de agua caída, se confabulaba para que la pelota rodara con vértigo. A los 3, y luego de esgarceos en ambas áreas, Cáceres ganó de arriba tras un tiro libre en forma de centro y su cabezazo se fue rozando el caño. Ahí nomás, Vangioni le pegó como venía a la salida de un rechazo defensivo y encontró a Cambiasso bien ubicado para atajar sin dificultad.
Newell's era más, su manejo era más prolijo y preciso que el de All Boys, que de todas maneras proponía algo parecido, con Morel como abanderado. Y a los 11, el Coloso enmudeció: el uruguayo Rodríguez la guapeó y ganó un córner, lo ejecutó y Ferrari se elevó limpió en el área y con un furibundo cabezazo venció el manotazo desesperado de Guzmán.
Ñuls sintió el impacto y en los minutos posteriores apareció como perdido, con errores infantiles en la salida que All Boys no logró transformar en peligro. Para colmo de males, ahí nomás dejó la cancha Maxi Rodríguez, lesionado. Y se lo perdió otra vez Vangioni con un disparo de media distancia que hizo esforzar al arquero visitante.
El partido empezó a jugarse en territorio de la visita, que con la ventaja mínima en el bolsillo esperaba bien ordenado y trataba de salir rápido de contra. Poco antes de la media hora, Vergini se lo perdió de manera increíble cuando remató desviado pisando el área chica luego de que Cáceres la bajara de pecho.
Morel le pegó de media distancia y la pelota se desvió en un defensor, y ahí nomás Newell's contestó con un cabezazo de Sperduti que pegó en el caño izquierdo de Cambiasso.
Los males siguieron rondando el Parque, porque a los 37 el Gringo Heinze detuvo su carrera en pleno pique y pidió el cambio. Entró Víctor López pero Martino perdía otro soldado, ¡y qué soldado!
Después se lo perdieron Pérez, Figueroa y Sperduti, Scocco no estuvo fino. La defensa de All Boys sacó todo lo que cayó en su área y así se consumó una primera parte que significó todo mal para Newell's.
El segundo tiempo arrancó bien arriba para las huestes leprosas. A los 2 nomás un derechazo de Cáceres encontró bien parado a Cambiasso. La tónica era la misma, aunque con All Boys más atento en la marca en la zona media. Y así contestó con un pelotazo largo que Mattos no pudo conectar solo ante Guzmán.
Martino se la jugó y apostó todo a ganador: mandó a la cancha a Maxi Urruti por un cansado y algo sentido Bernardi. Pero se resignó el armado y entonces All Boys creció. López la pellizcó justo ante Amato, Borghello desvió su remate tras buen pase de Morel.
Scocco contestó birlando la marca de tres hombres y sacando un potente derechazo que se fue apenas alto. Luego Urruti vio la amarilla por simular una falta dentro del área tras una buena jugada de ataque local.
Y Newell's se perdió, se encegueció, fue con empuje y nada más. Entonces el inteligente All Boys hizo lo que más le convenía. Matos se lo perdió inexplicablemente solo ante Guzmán.
Y a los 28 al arquero local se le saltó la cadena. Primero tapó un mano a mano de manera magistral ante Amato, pero la pelota quedó jugable y Guzmán salió a defenderla, la ganó y cuando quiso salir jugando en vez de reventarla se la dio a Juan Pablo Rodríguez, que se fue solo y ya dentro del área recibió un tackle del arquero. Penal y Matos que no perdonó.
Sólo el público creía y alentaba, porque adentro los jugadores rojinegros deambulaban en la cancha sin convicción. Aunque, con mucha garra iban, chocaban pero dejaban abierta la puerta de la recuperación.
El partido se calentó afuera. Martino y Pautasso debieron dejar la cancha tras un altercado con un integrante del cuerpo técnico visitante.
Después Cambiasso se jugó entero ante Scocco y evitó la chance clara. Y ahí nomás, en el minuto 90, Pablo Pérez logró el descuento al tocar al gol tras un cabezazo de Urruti. Y los 6 minutos que quedaban por delante fueron emotivos. La visita se abroqueló contra su área aunque pudo aumentar pero Villalba tapó ante Rodríguez. Newell's fue con todo pero no alcanzó.