Es la primera vez en los 101 años de historia del club Central Córdoba que se toma la decisión de formar una escuelita de fútbol infantil para nenas. Una demostración más de que las mujeres y las niñas tardan en ocupar los espacios que se merecen, pero llegan. Entre los impulsores de la medida _que prevé que las nenas, al igual que los nenes, comiencen a jugar a la pelota a los 4 años_ está el director deportivo del club, Daniel Teglia. Y para llevar adelante el trabajo cuenta con la ex jugadora y entrenadora Carolina Caggiano, de 27 años, quien ya logró que las chicas charrúas mayores salgan a la cancha, aunque por ahora amistosamente.
Este jueves, a las 19, lo harán una vez más: las jugadoras de barrio Tablada llevarán dos equipos (menores y mayor) al Riviera Futbol 5 Club (Italia 4345). La pelota ya empezó a rodar con las chicas de Central Córdoba, difícil que se detenga.
Daniel Teglia comentó que por ahora sólo juegan las adolescentes, porque para integrar a las más chiquitas hay que hacer todo un trabajo cultural especialmente con los padres. Pero van a intentarlo.
"Y al igual que con las otras escuelitas de deportes amateur del club se seguirá con las nenas del fútbol la lógica de jugar lejos de la competencia feroz", dijo el coordinador deportivo Gustavo Del Grande.
"Sí, nuestros entrenamientos son lúdicos, no presionamos, queremos que las nenas vengan y se diviertan. Les enseñamos algo de técnica: cómo parar la pelota, trasladarla con los pies. Algunas hacen jueguitos y les damos tarea: que se pongan en los ratos libres contra una pared a jugar, sólo a jugar", dijo la entrenadora.
Las prácticas son los lunes y jueves, de 20 a 22, en piso, en San Martín 3250, y los martes, por espacio y disponibilidad, se entrena frente al club, en césped. Por ahora se juega en cancha de cinco o de siete, pero la idea es llegar a jugar de once. E incorporar a las chiquitas, aunque para lograr este objetivo será necesario que los varones compartan espacios y posibiliten que las nenitas que puedan acercarse jueguen más temprano.
"Tenemos una treintena de nenas y adolescentes. Hay muy poquitas de 11 años y queremos que vengan aún más chiquitas. A los 4 años es la edad en la que habitualmente se comienza la actividad deportiva con los nenes, queremos que eso también se aplique a las nenas, aunque sabemos que hay que batallar algunos preconceptos con los adultos. Algunos tildan a las jugadoras de machonas o creen que el juego definirá su orientación sexual. Es todo un trabajo que va más allá de los deportivo y que es más fácil hacer ahora, cuando yo misma jugaba siendo adolescente la discriminación era más dura", aseguró Caggiano.
La mayoría de las chicas de Central Córdoba son del barrio, también de Villa La Lata, de barrio Las Flores y de Villa Gobernador Gálvez.
"Llegan al club diciendo que se cansaron de jugar en la calle con amigos y hermanos. Más de un dirigente se ha asombrado al verlas pelotear y ha preguntado en broma si no les prestamos las jugadoras para la primera. Acostumbrarse a verlas y a aceptarlas en la cancha es un trabajo día a día. Con algunos padres tratamos de que las nenas se queden a ver jugar a los varones y también que se mezclen con ellos en algún que otro entrenamiento", dijo la entrenadora.