El equipo del Patón cuenta con todas las cartas a su avor
Se supone que Argentina no debiera tener inconvenientes, siempre atendiendo a que el fútbol para muchos es la dinámica de lo impensado, aunque la lógica suele tener un lugar privilegiado.
6 de septiembre 2016 · 00:00hs
Se supone que Argentina no debiera tener inconvenientes, siempre atendiendo a que el fútbol para muchos es la dinámica de lo impensado, aunque la lógica suele tener un lugar privilegiado. Ya se habló de lo que será la ausencia de Messi (ver página 3), pero la estructura futbolística de esta Argentina va más allá de la figura de Leo, sobre todo tratándose de un partido en el que enfrente estará un rival que hace intentos denodados para dejar la última colocación en la tabla de posiciones.
En el nombre por nombre Argentina gana por goleada. Hoy será tiempo de llevar eso a la cancha. No intentando hacer gala de esa aseveración a rajatabla e intentar ganar por una diferencia abultada, sí para hacer pesar la real diferencia entre un equipo y otro. Si no está Messi aparece un Lamela, ya con experiencia en la selección. Si no está Dybala, juega Banega, pieza clave en el funcionamiento que Martino intentó darle al equipo hasta hace poco. Hasta la variante de Marcos Rojo por Mas dará un salto de calidad en defensa y a la hora de las proyecciones, siempre y cuando al defensor de Manchester United no se le salte la térmica como le ocurrió en la final de la Copa América Centenario, en lo que fue su último partido con la selección. Así podría hacerse el ejercicio con el resto de los jugadores. Igual, eso no entierra la sensación de que varios futbolistas argentinos deben elevar su nivel (uno de ellos es Angel Di María) para que la diferencia sea realmente palpable. La realidad de uno y otro habla por sí sola.
Haber sorteado a un rival incómodo como Uruguay es el as en la manga para el Patón y los suyos. El porrazo de Venezuela en tierras colombianas, la contracara.
Con las cartas echadas, sólo resta lograr que la lógica ocupe su lugar en el Metropolitano de Mérida. A priori, en el reparto de barajas Argentina lleva todas las de ganar.