Cómo estará Central explorando el fondo del mar que el técnico elegido para tratar de evitar el descenso en la temporada que viene es Diego Cocca. Sin ánimo de ofender a nadie con estas líneas, Cocca es un entrenador del montón. No está entre los peores, pero tampoco entre los mejores. Lo que sí tiene es poco linaje para sentarse en un banco tan volcánico como el de Central. Es cierto que salió campeón con Racing en 2014 y hasta puede abrazarse al trofeo de haber ascendido con Defensa y Justicia, pero también es verdad que sus equipos suelen dar lástima en la cancha. Su sistema preferido es el primitivo 4-4-2, pero con el agregado de que las piezas se articulan con más frecuencia de la acostumbrada al rol de partenaire. Traer a Cocca a Central es como copiarse a libro de lo que fueron en su momento las contrataciones de Gustavo Alfaro, Carlos Ischia, Néstor Gorosito, Paolo Montero y otros experimentos de laboratorio que terminaron con miles y miles de hinchas insultándolos en todos los idiomas en el Gigante. Como bien dijo el gran filósofo canalla Miguel Angel Russo, Central no es para cualquiera y mucho menos para un técnico al que le llevará un tiempo considerable impregnarse de la idiosincrasia del mundo Central. Incluso, poco importa que Cocca venga apadrinado por Christian Bragarnik, quien es señalado como uno de los dueños del fútbol argentino. Porque en el imperio de Bragarnik también hay buenos entrenadores, muy superiores a Cocca. Basta con pasar lista para demostrarlo. Coudet, Beccacece, Almirón y otros que están más capacitados. Por obvias razones Beccacece nunca dirigirá a Central y los otros dos están ocupados. Sinceramente, lo mal que tiene que estar Central para contratar a Cocca. No hay animosidad para ser pájaro de mal agüero ni existe una aversión hacia el trabajo de Cocca. Es cuestión de gustos nomás. Y de realizar una lectura acertada de la composición del lugar en el que pisará a partir de mañana Cocca. Central no es para tibios, sino para los que tienen arrojo. Y si hay algo que nunca se les vio a los equipos de Cocca son agallas.