El juez federal de Victoria, Federico Martin, hizo lugar a un planteo del intendente de esa ciudad entrerriana, Domingo Maiocco, e intimó a un particular a iniciar las obras que impidan que el puente Rosario-Victoria (en rigor, el enlace vial) sea afectado por la creciente del río Paraná y que podría tener un impacto negativo a raíz de un terraplén construido ilegalmente. Concretamente, el magistrado intimó al ganadero Martin Stenner a que en un plazo de 24 horas comience con la demolición del terraplén que construyó en zona de islas.
La Secretaría de Ambiente de Entre Ríos negó la declaración de impacto ambiental solicitada por Martín Esteban Stenner en relación con obras de endicamiento ejecutadas en zona de islas en el éjido Municipal de Victoria, en la zona conocida como la Isla del Pillo.
El tema se remonta al año 2013, cuando el productor construyó terraplenes y modificó cursos de agua, en el marco de un emprendimiento productivo destinado a engorde de hacienda, publicó el periódico ditital ambientalista ERA Verde.
A fines del año pasado, la cartera de Ambiente le denegó el estudio de impacto ambiental y también le impuso el cese de toda actividad de movimientos de tierra o terraplenes en el predio de su propiedad, disponiendo que en 30 días procediera a la apertura total de los terraplenes. También le exigió la presentación de un plan ecológico de restauración del humedal afectado por el terraplenamiento en 60 días. La resolución es de noviembre de 2022.
Ahora, un año después, el intendente de Victoria elevó una notificación al Juzgado Federal por la proyección de crecida del río Paraná y la existencia de un terraplén ilegal que no ha sido derribado, por lo que se prevén "posibles riesgos" en la conexión vial entre Rosario y Victoria.
Maiocco explicó que por indicaciones de la Dirección de Hidráulica de Entre Ríos se gestionó ante la Secretaría de Ambiente la intervención para "la demolición de un terraplén (...) propiedad de Martín Esteban Stenner". El juez conoce al productor porque en su despacho se lleva una causa que acusa al ganadero por "acciones de modificación del ambiente de las islas", prácticas que están prohibidas.
Tal cual lo publicó el diario UNO Entre Ríos, hace 10 años se le pide institucionalmente al empresario rural que tire abajo 24 terraplenes que levantó de forma irregular.
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Estas construcciones ilegales no permiten el fluir natural de las aguas en períodos de intensas sequías y ahora pueden ocasionar daños ante un escenario de creciente del río Paraná.
El terraplén que el juez federal de Victoria ordenó demoler se ubica a la altura del puente Paranacito. Se trata de una construcción de al menos 100 metros de largo ubicada en el campo del empresario dentro del área natural protegida Humedales e Islas de Victoria. Según se lee en la información conocida por ERA Verde, se detalla que el pedido se realiza "ante la fuerte crecida del río Paraná y teniendo en cuenta posibles riesgo en la conexión vial Victoria – Rosario". La solicitud se funda también en "indicaciones técnicas del ingeniero Jorge Di Persia, perteneciente a la Dirección de Hidráulica de la provincia de Entre Ríos”.
El juez ordenó al ganadero Stenner informar el inicio de las obras y sus avances al Juzgado y a la Secretaría de Ambiente "cada tres días corridos". Asimismo, durante el tiempo que duren las tareas el chacarero deberá permitir el ingreso de asociaciones ambientales y fuerzas de seguridad a los lotes donde se den las obras de derrumbe, para que puedan "controlar su cumplimiento”.