Los familiares, amigos y compañeros de la hincha de Central Ivana Garcilazo pintaron este lunes por la tarde una estrella roja en su memoria en la esquina de Ovidio Lagos y Montevideo, donde hace un mes fue asesinada a baldosazos, en un crimen por el que está acusados y detenidos dos socios de Newell's: el profesor de educación física Ariel Cabrera, de 42 años, y el vendedor ambulante Juan José "Tuerca" Massón, de 40 años, y acusado pero aún prófugo el profesor de química Damián Reinfestuel, de 42 años.
A un mes del crimen de Ivana Garcilazo, de 32 años, quien fue asesinada cuando volvía de ver el clásico en el Gigante de Arroyito, la querella de su familia, representada por el abogado penalista Marcos Cella, pediría el cambio de carátula de “homicidio agravado por la ley del deporte” a la de “homicidio calificado”, en el marco de la misma ley, según anticipó el letrado a La Capital.
“Para mí este es un crimen por odio y que, además, tiene premeditación y alevosía, así que es un homicidio calificado que tiene una sola pena: la prisión perpetua”, advirtió Cella a este diario.
En este sentido, el abogado de la querella abundó que “es un crimen por odio porque a Ivana la mataron porque tenía puesta la camiseta de Central, si hubiera tenido puesta la camiseta de Newell's no la habrían matado”.
En esta línea, Cella reportó que “además la mataron por ser mujer, porque su novio iba muy cerca de ella y no lo atacaron; si tres hombres agarran baldosas o adoquines y se los tiran a una mujer, que además está más indefensa aún porque tiene sus dos manos en la moto, eso es un acto cobarde, atroz y alevoso, en el que los tres atacantes no se expusieron a ningún riesgo”.
Asimismo, el abogado penalista reportó que “los tres autores salieron de un domicilio con un plan, que era el de matar, además que uno de los asistentes al almuerzo les advirtió que «No sean pelotudos, a ver si matan a alguien y se comen 30 años en cana» y los tipos van y cometen un asesinato alevoso y cobarde, aquí no hay una cuestión de mala suerte sino que hay un plan y esto es un homicidio calificado”.
Cella sostuvo que "es muy importante que la jueza haya remarcado lo que planteamos como querella. Tuvo en cuenta que Ivana llevaba la camiseta de Central. Los tres acusados salieron con un plan y no les importó el resultado a pesar de que hubo alguien que les advirtió que podrían terminar presos si mataban a alguien. Salieron con un plan, sabían lo que querían hacer y, lamentablemente, lo concretaron”.
En este punto, el abogado querellante anticipó que “ahora el fiscal Gastón Avila está en plena investigación, así que vamos a dejarlo trabajar pero nos reservamos el derecho de pedir un cambio de carátula de homicidio agravado por la ley del deporte a homicidio calificado, dentro de la misma ley”.
En tanto, Cella adelantó que "hoy (por este lunes) nos reunimos con los funcionarios del Consulado de Bolivia para pedir su colaboración" en la búsqueda y detención del profesor de química Damián Reinfestuel, el único de los tres acusados del crimen de Ivana Garcilazo que permanece prófugo luego de cruzar a Bolivia por el paso salteño de Salvador Mazza y que tiene un pedido de captura internacional de Interpol, según informó el fiscal Avila.