Hay pocos argentinos que no reconozcan de inmediato los cuadros o murales de Ricardo Carpani, aun
cuando no sepan quizás quién es el autor. Sus hombres y mujeres fuertes, sólidos, geométricos, casi
como esculturas, pueblan el imaginario, sobre todo el relacionado con los movimientos sindicales y
de lucha obrera.
Tras cumplirse 10 años de su muerte el año pasado, Carpani fue
homenajeado con una exposición en la Casa de América de Madrid, hasta donde su compañera de toda la
vida, Doris Halpin, hizo llegar 20 obras y un video en el que se cuenta la trayectoria de este
pintor (1930-1997), vinculada a su compromiso social y a la evolución política de Argentina en los
años en que le tocó vivir, como los de la dictadura, que fueron para él de exilio en España.
“El video fue especialmente pensado para gente joven en la
Argentina. Porque era tanta la demanda de los chicos que venían, preguntaban, querían que fuera a
dar charlas a la universidad”, explicó Doris.
“Ante esta realidad, el video se hizo enfocado a los temas
políticos. Porque éste es un período de construcción en América latina. Puede ser que resulte bien,
o mal, por momentos pareciera que podría tener éxito, y por momentos pareciera como si se
retrocediera. Yo creo de todos modos que son procesos muy vivos, muy incipientes. Hay una necesidad
de construir consciencia, conocimiento, compromiso. Todo es una construcción. Puede ser importante
el cambio político que se está dando.
El exilio casi por casualidad de los Carpani duró diez años entre Palma
de Mallorca, Barcelona y Madrid, hasta que en 1984 pudieron regresar a Argentina, y se encontraron
un país que era muy diferente al que habían dejado.
Por eso, un conocedor dividió la obra de Carpani en tres períodos, que
Halpin describe. “Uno antes del exilio, en el que había la convicción de que el cambio estaba
a la vuelta de la esquina, al alcance de la mano. Era el que él titula de la ilusión. Hay un
lenguaje plástico pétreo, muy voluminoso, de formas muy geométricas, muy rotundas. Muy solemne
también”.
Después viene la etapa en España, que es la de la duda. “No es que
se dude de los fines que se quiere alcanzar, sino de la metodología empleada, que había demostrado
ser una catástrofe”, explica Halpin. “Y luego viene el tercer período, que es el de la
esperanza. ¿Por qué lo titula así? Porque Ricardo, sin ser consciente de ello empieza a hacer una
serie de obras cuyo título son interrogantes. Por ejemplo: ¿Qué hace un tipo como yo en un lugar
como éste? ¿Dónde está la parada del 60? ¿Quiénes somos, de dónde venimos, adónde vamos?,
parafraseando a otros autores”.
Expresión metafórica. De esta época son los cuadros de Carpani en los que emplea
la metáfora de la selva, y aparecen personajes anteriores, como sus compadritos, en medio de ese
escenario. Es “una metáfora de la sociedad con alimañas, animales feroces, y también con
animalitos pequeños”, explicó Halpin.
Uno de sus proyectos, añadió, era conseguir un museo para la obra de
Carpani en Argentina, pero ya no está tan segura de que sea lo mejor. “Comprendo que en la
medida en que un coleccionista invierte en su obra, la cuida un poco más, la protege, están
protegiendo sus inversiones. Y desde este punto de vista no sé si no es más saludable apostar por
un museo”.
Con respecto al compromiso político de Carpani, Halpin cree que hoy la
situación ha cambiado. “El arte de otras épocas reflejaba el avance, retroceso o el
despliegue de la civilización. Pero en la actualidad hay una desconexión. Se ha perdido esta
necesidad de expresar, de ser expresión de algo, son expresiones muy individuales, muy personales.
Para un artista comprometido su obra se cierra necesariamente en aquel que la está contemplando,
ahí es donde se cierra el mensaje, la idea”.
Pero en especial, subraya, lo que es importante destacar es que en
Carpani hay un resurgir del muralismo, “que es una forma más popular, más pública, de hacer
arte. Para Carpani el movimiento muralista latinoamericano (que no son solamente los mexicanos como
normalmente se hace creer) era uno de los más innovadores e importantes del siglo XX”.