El actor estadounidense Peter Falk, mundialmente famoso por su papel como inspector Columbo en la serie de mismo nombre surgida en los años 70, murió en la noche del jueves a los 83 años en su casa de Beverly Hills.
El actor estadounidense Peter Falk, mundialmente famoso por su papel como inspector Columbo en la serie de mismo nombre surgida en los años 70, murió en la noche del jueves a los 83 años en su casa de Beverly Hills.
Su familia no precisó las causas de su muerte. Según su hija adoptiva, Catherine Falk, el actor padecía desde hace años de demencia senil y Alzheimer. Un tribunal había concedido ya en 2009 la tutela del actor a su esposa.
Falk ganó cuatro premios Emmy por su papel como detective en "Columbo". También estuvo nominado dos veces al Oscar, en 1961 por "Murder, Inc." y en 1962 por "Pocketful of Miracles", junto a Bette Davis.
También actuó bajo las órdenes del alemán Wim Wenders en "Las alas del deseo", en 1987, y de otros reconocidos realizadores como Frank Capra, John Cassavets y Blake Edwards.
Pero donde Falk consiguió la popularidad fue dando vida al inspector Columbo en la serie del mismo nombre que protagonizó entre 1971 y 1978, y que volvió a salir al aire en 1989.
Falk tenía un ojo de vidrio a causa de una operación a la que fue sometido cuando tenía tres años de edad, cuando le detectaron un tumor canceroso.
"La prótesis le dio a sus personajes una mirada peculiar, casi socarrona. También tenía un pequeño problema de dicción, que le hacía pronunciar la L emanando un sonido que venía desde del fondo de su garganta y que era especialmente enfático cada vez que pronunciaba el nombre de Columbo en la serie", recordó el diario The New York Times.
Falk dio vida al popular detective de Los Angeles que desmarañaba intrincados casos de asesinatos de la clase privilegiada de Beverly Hills y Malibú.
"Me encanta", dijo una vez Falk a TV Guide sobre su personaje de Columbo, según recoge Los Angeles Times. "Es excéntrico, y da la impresión a la gente de que es ignorante", afirmó. "Su obsesión se esconde bajo la cortesía que tiene. Tiene un astuto sentido del humor, por naturaleza es educado y totalmente sin pretensiones. Pero que Dios ayude a quien cometa un crimen en Los Angeles", describía Falk a su Columbo.
Falk nació el 16 de septiembre de 1927 en la ciudad de Nueva York y se crió en la localidad de Ossining, al norte del estado neoyorquino, donde su padre tenia una tienda de ropa.
Tras realizar sus estudios de secundaria, fue brevemente a la Universidad de Hamilton, que dejó para enrolarse en la marina mercante como cocinero.
Luego regresaría a Nueva York, donde se licenció en ciencias políticas en la prestigiosa New School, para luego hacer una maestría en administración pública en la Universidad de Siracusa.
Después trabajó en la oficina presupuestaria del estado de Connecticut, donde empezó en el mundo de la actuación tomando clases y formando parte de un grupo de teatro amateur.
Tenía 29 años cuando decidió mudarse a Nueva York y empezar su carrera como actor, donde hizo su debut profesional en 1956 con una producción del llamado Off Broadway con "Don Juan" de Molière, lo que significaría el inicio de una próspera trayectoria profesional.
Apenas un año antes había cursado arte dramático con Eva Le Cayenne, y en 1957 en el Meismer Worshop, donde tomó partido en obras de teatro independiente.
Un año después se estrenaba en el séptimo arte con la película de Nicholas Ray "Muerte en los pantanos" que le abrió la puerta a Hollywood donde Falk no tardó en causar sensación.
Sus dos siguientes proyectos, "Murder. Inc." (El sindicato del crimen, 1960) y "Un gángster para un milagro" (1961), este último de Frank Capra, le valieron sendas candidaturas a los Oscar como actor de reparto.
El premio se le escapó de las manos en ambas ocasiones y pronto descubrió que su talento encontraría más reconocimiento en la televisión, donde cosecharía hasta 12 nominaciones a los premios Emmy, que le depararían cinco galardones.
"Colombo", serie sobre un teniente de policía de homicidios, hizo que Falk se convirtiera en mundialmente famoso a partir de la década de los 70.
"Colombo" giraba en torno a las investigaciones de un detective de gabardina y puro, cuyo aspecto desaliñado y aires despistados solían hacer que los asesinos se confiaran y subestimaran su habilidad para resolver crímenes.
El programa, del que se hicieron 13 temporadas entre 1971 y 2003, tuvo como uno de sus creadores a William Link, quien en los 80 desarrollaría "Se ha escrito un crimen", y se cree que el personaje de Falk estaba inspirado en Petrovitch, el detective imaginado por el autor ruso Fiódor Dostoievsky para su novela "Crimen y castigo".
El mazazo final. Con su Peugeot 403 cabrio gris oscuro, Columbo se movilizaba en la búsqueda del asesino, tarea que en general lograba finalizar con éxito gracias a su tenacidad y preguntas astutas.
Cuando ya estaba a punto de salir de un lugar, en general volvía sobre sus pasos y decía: "Tengo otra pregunta..." o "Hay una pequeñez...". El detective resolvió desde 1968 un total de 69 casos.
Columbo remataba todas sus investigaciones con una frase que quedó para la posteridad: "Sólo una cosa más...", que pronunciaba justo cuando el criminal pensaba que se había salido con la suya y anticipaba la magistral resolución del caso.
Esa muletilla del detective le sirvió a Falk para titular sus memorias, "Just One More Thing", que publicó en 2006, un año después de que hubiera empezado a dar señales de que padecía demencia senil.
Falk fue también diez veces candidato a los Globos de Oro por "Colombo", premio que ganó una vez en 1973.
Entre sus personajes más recordados en la gran pantalla se encuentran los de películas como "Una mujer bajo la influencia" (1974), "Las alas del deseo" (1987) o "La princesa prometida" (1987).
En junio de 2009, el actor fue incapacitado legalmente por su enfermedad y quedó bajo la custodia de su segunda mujer, Shera Danese, después de un año de batalla legal con su hija adoptiva Catherine por el control de sus bienes.
La demencia de Falk empeoró tras someterse a operaciones dentales y de cadera en 2007 y 2008, y ya ni se acordaba que había encarnado a Columbo.
La última película en la que intervino el actor fue "American Cowslip" (2009), junto a Val Kilmer.
No llevaba pistola
Peter Falk encarnó un policía alejado de los estereotipos de la época. El teniente Columbo usaba una gabardina vieja y un Peugeot 403 arruinado. Cada episodio comenzaba con un crimen y ya se sabía que Columbo descubriría al asesino gracias a un detalle menor. Una vez descubierto el sospechoso, el teniente no lo iba a dejar un segundo. Además, sabía hacerse pasar por un tipo despistado para engañar la vigilancia del sospechoso. Columbo no llevaba pistola, jamás tuvo que recurrir a la violencia física y los crímenes siempre ocurrían en la alta sociedad.