El consumo no repunta. Las ventas de los comercios minoristas cayeron 7,4 por ciento anual en agosto, a pesar de las estrategias de "emergencia" para impulsarlas con ofertas y cuotas. Así lo informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came).
La entidad empresaria señaló que el consumo continuó "debilitado" en agosto, el octavo mes consecutivo en el que las ventas registraron una caída, acentuando la crisis que atraviesa la actividad comercial.
Con este resultado, las ventas minoristas medidas en cantidades acumularon una caída promedio del 6,7 por ciento en los primeros ocho meses de este año, en comparación con el mismo periodo del 2015.
El mes pasado, según el sondeo, "se sintió fuerte la pérdida de poder adquisitivo de las familias".
□El informe indicó que si bien el mercado volvió a ofrecer cuotas sin interés, "hubo más rechazos de operaciones que otros meses o divisiones de compras entre más de un plástico".
Came aclaró que "aún así los niveles de transacciones fueron bajos". Las bajas anuales más pronunciadas en el mes ocurrieron en electrodomésticos y artículos electrónicos, con 17,3 por ciento; neumáticos, con 15,7 por ciento; ferreterías, con 11,8 por ciento; materiales para la construcción, con 10,8 por ciento; y bazares y regalerías, con 9,6 por ciento.
Marcas propias. En tanto, un informe de la consultora especializada en consumo CCR relevó una caída de 3,4 por ciento en todo los canales de comercialización minorista. En este contexto, subrayó que las marcas propias de los productos de las cadenas de supermercados se vienen imponiendo por precio.
"No son las segundas marcas sino las marcas propias de los supermercados las que están creciendo en ventas", explicó el director comercial de CCR, Daniel Rodríguez Cetrán.
A pesar de que el consumo se retrae, el supermercadismo sigue expendiéndose pero en formatos pequeños o medianos de locales de 500 metros cuadros o menos, "porque son formatos en los que se incluyen promociones y Precios Cuidados y los clientes efectúan compras racionales, sin tener que hacer cola como en los hipermercados", explicó el especialista.
La canasta de productos relevada por CCR no incluye productos como carne y verduras y sólo abarca alimentos no perecederos de almacén, bebidas, cosméticos, tocador y limpieza.
"La mayor caída de consumo se dio en mayo, con una baja del 5 por ciento, y luego, en junio y julio, la caída se fue desacelerando", explicó. Consideró que esa ralentización se dio merced a "los acuerdos paritarios, el medio aguinaldo y la recomposición del poder adquisitivo", con la que el consumidor pudo afrontar mejor la compra de los productos.
Si los hipermercados y los formatos de cercanía bajaron sus ventas en julio 3,1 por ciento, los autoservicos y los almacenes cayeron 3,6 por ciento.
Si se hace un comparativo de largo plazo, el consumo acumulado de enero a julio tuvo una caída del 3 por ciento, que se constituyó "en la baja más fuerte de los dos últimos años", consideró. Cetrán dijo que en interior del país la caída de consumo fue más pronunciada (4,1 por ciento).
Ley de góndolas. En este marco, el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (Indecom) consideró que una ley de góndolas que obligue a los supermercados a ofrecer productos de pequeñas y medianas empresas podría forzar una baja del 30 por ciento para los alimentos de consumo masivo.
El ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, anunció la semana pasada que estudia implementar la llamada ley de góndolas, una iniciativa que se aplicó en Ecuador, con el objetivo de desacelerar la suba de precios y fomentar las economías regionales.
El presidente del Indecom, Miguel Calvete, señaló que "existen diferenciales de hasta un 30 por ciento entre productos elaborados por pequeñas industrias y los que producen las grandes compañías".
"Los consumidores gasten me podrían optar por los artículos más económicos y aumentaría la competencia", dijo Calvete sobre los beneficios de este proyecto.
Más heladeras importadas
Las importaciones de heladeras durante el mes de agosto alcanzaron a 11.659 unidades, el doble que en julio y 570% más que en el mismo mes del año pasado. Desde principios de 2016, ingresaron al país 75.985 heladeras, contra 19.981 del mismo período de 2015. Los datos corresponden al Observatorio de Importaciones que crearon el Ministerio de Producción de la provincia y la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). En paralelo, fabricantes locales señalaron que sus ventas cayeron 45% en agosto, respecto del mismo mes de 2015.