La producción industrial argentina registró en mayo un crecimiento de 6,9 por
ciento con relación a igual mes del año pasado y una caída de 0,3 por ciento frente a abril, en
términos desestacionalizados, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos
(Indec).
En el acumulado de los primeros cinco meses la actividad manufacturera se
expandió 7,2 por ciento.
El crecimiento industrial estuvo liderado por la industria automotriz, que
exhibió un aumento de 24 por ciento en forma interanual.
El segundo sector más dinámico fue el de las industrias metálicas, que mostró un
progreso de 14,7 por ciento.
Repuntó el acero. Dentro de este rubro, la producción de acero crudo aumentó
11,2 por ciento, mientras que la de aluminio primario subió 36,3 por ciento.
El conglomerado de empresas que se dedica a la fabricación de materiales para la
construcción se expandió 5,2 por ciento.
Esta evolución se explica por subas de 2,5 por ciento en la producción de
cemento y "otros materiales" y una reducción de 2,4 por ciento en la fabricación de vidrio.
La refinación de petróleo subió apenas 1,2 por ciento y es el único sector
muestra un comportamiento negativo en el acumulado anual, 0,3 por ciento.
Los alimentos. En tanto, el sector alimenticio mostró una mejora de 2 por
ciento, con dispar comportamiento entre los sectores más sensibles.
La producción de carnes rojas cayó 15,8 por ciento, al tiempo que la de carnes
blancas subió 7,2 por ciento. Por su parte, la producción de lácteos mejoró 7,6 por ciento, pese a
que mayo fue uno de los meses de mayo agitación por el paro agropecuario.
A su vez, la molienda de cereales y oleaginosas tuvo una baja de 0,5 por
ciento.
Por su parte, la producción de productos químicos aumentó 2,1 por ciento, con
una suba de 3,9 por ciento en la elaboración de agroquímicos.
El sector privado no evaluaba generar nuevos durante junio, ni aumentar las
horas trabajadas, según se desprende de un informe publicado ayer por el Instituto Nacional de
Estadística y Censos (Indec).
El organismo oficial precisó que el 93,1 por ciento de las firmas no advertía
cambios en su dotación de personal en el mes en curso, mientras que el 3,1 por ciento preveía
despidos y apenas un 3,8 por ciento tomaría algún trabajador.
A su vez, el 87,5 por ciento de las empresas dijo que la cantidad de horas
trabajadas se mantendría estable, un 5,8 por ciento espera una merma y sólo el 6,7 por ciento
anticipaba un crecimiento.
Demanda. Con respecto a la demanda, el 76,6 por ciento consideró que la demanda
seguiría en los mismos niveles del mes pasado, al tiempo que el 11,9 por ciento prevé un aumento y
el 11,5 por ciento estima que tendrá una caída.
A su vez, el 62,5 por ciento de las empresas evaluó que sus exportaciones no
sufrirán cambios, mientras que el 18,9 por ciento anticipa un crecimiento de los envíos al exterior
y un 18,6 por ciento una baja.
Con relación a las importaciones, el 74,6 por ciento cree que seguirán estables,
el 13,5 por ciento confía en un incremento y el 11,9 por ciento anticipa una baja.