En lo que va del año en Rosario se verifica una marcha con marcada línea ascendente en hechos de alta lesividad. Con 113 homicidios a la fecha la tendencia, si no desacelera, empujará los números a un registro histórico, que puede quedar arriba de 2013, año en que con 271 casos fue el de mayor cantidad de asesinatos. Pero hay otro guarismo muy significativo para mensurar los niveles de violencia: la cantidad de incidentes con armas en los barrios o sobre personas que circulan armadas. En los que corre de 2022, estos datos muestran algunas novedades.
Un informe oficial elaborado con cifras volcadas hasta este viernes indica la distribución territorial en Rosario de todo tipo de hechos con armas según los llamados entrantes a la central 911. Lo más llamativo es que los barrios de las zonas noreste y oeste predominan por sobre los de las áreas sur de la ciudad, donde en la última década se registraron no solo incidentes en mayor cantidad sino también los más emblemáticos.
Una zona altamente conflictiva como Ludueña aparece en primer lugar. No parece una casualidad que este barrio haya sido en forma persistente foco de atención para la prensa. El pasado 19 de febrero un informe que abrió la edición impresa de La Capital indicaba que a menos de dos meses de empezar 2022 habían sido heridos de bala allí unos 25 chicos. "Los vecinos denuncian balaceras a toda hora y vivir en un desamparo insoportable", indicaba la crónica. Este sábado se repitió un informe que refiere a una violencia muy intensa en torno de la comisaría 12ª, que es la del barrio, desde donde según las referencias de vecinos hay una notoria regulación del delito.
Entre los barrios que marcan las alzas más llamativas en los hechos violentos, y por mucha distancia, no hay ninguno de la zona sur. Las denuncias por llamados al 911 (por hechos como disparos, personas amenazadas con armas y personas armadas en la calle) sitúan como se anticipó a Ludueña en primer lugar con 216 incidentes en lo que va del año. En este vecindario, atravesado en algunas franjas de fuertes carencias por una violencia consolidada, hay días con hasta siete llamados al 911 por distintos hechos de violencia armada (como el 26 de enero) o seis llamados (19 de febrero).
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Le siguen en esta nómina los barrios Triángulo y Moderno, que se despliega vastamente con epicentro en Rouillón y Seguí, con 184. Después figuran Empalme Graneros, pegado a Ludueña, con 148 y Parque Casas, en el noreste hacia Circunvalación, con 128.
Por debajo de estos cuatro nudos territoriales, y con cifras notoriamente más bajas, recién aparecen dos barrios de la zona sur: Las Flores en quinto lugar (77 hechos) y Cordón Ayacucho (que es parte de Tablada, con 74). En la nómina prosiguen dos barrios de la zona oeste: Villa Banana (71 hechos) y Vía Honda (Avellaneda 4500, con 58).
Posteriormente aunque ya con menos hechos figuran Grandoli y Gutiérrez, Bella Vista, la Zona Cero (próximo a Nuevo Alberdi), Villa Pororó (pegado a Villa Banana), Flammarion (a la altura de esa calle hacia Uriburu), Santa Lucía (27 de Febrero y Circunvalación) y Fuerte Apache (lindante con Tiro Suizo).
Los hechos consignados son mayormente por disparos, lo que incluye casos de balaceras, heridos de bala y homicidios. Son en total 550 llamados al 911 que reportan personas abriendo fuego con armas. Tomando los casos totales en Ludueña, el barrio con más incidencias, indica que hay desde que empezó el año un promedio 1.54 llamados por día. En contraste un barrio como el corredor de Grandoli en zona sur tiene un promedio de 0,30 hechos por día en el mismo lapso.
El informe fue elaborado por el Observatorio de Seguridad Pública (OSP) de la provincia, en el que cruzan datos Ministerio de Seguridad, Ministerio Público de la Acusación (MPA-Fiscalías) y Policía de Santa Fe.
¿Qué significación pueden tener estas cifras? Para el fiscal Pablo Socca, de la Unidad de Balaceras del MPA en Rosario, "lo interesante es poder contrastar con los años anteriores. Da la impresión que la violencia barrial fue mutando. Hay zonas en el sur de la ciudad que estaban más arriba anteriormente, con mucha incidencia de refriegas por disputas de narcomenudeo, pero ahora se nota que las incidencias por disaparos de armas dan un salto hacia el noreste, como en Ludueña y Empalme. Hubo más acción persecutoria del delito violento en áreas como Tablada, el corredor de Avenida Grandoli y Las Flores en el sur que por más que los hechos prosiguen las cifras dejan ver un descenso. Pero también recrudecen los incidentes en otras zonas", analizó.
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El mapa que elaboró el OSP también clarifica que la mayor densidad de hechos violentos de arma, cuadrícula a cuadrícula de la ciudad, tiene a las zonas noreste y oeste como las más sufridas. Y en la zona sur los hechos de esta clase parecen más atemperados. Este universo de datos aparece como un registro más abarcador del fenómeno de la violencia en la ciudad que el que se confecciona con los informes de homicidios que, en general, se toma como principal referencia. Se trata de un mapa de la violencia causada por hechos con todo tipo de armas en toda la ciudad.
Los incidentes por llamadas al 911 hasta este viernes eran 1.142 en Rosario. El año pasado 2021 en toda la ciudad los registros del mismo OSP marcaron que hubo 206 homicidios (241 en todo el departamento) de los cuales el 90 por ciento fueron mediante arma de fuego. El mismo instituto indica que en la ciudad los heridos de bala fueron 710 lo que supone dos baleados por día en promedio.