Además, muchos de ellos criticaron al intendente Osvaldo Cáffaro y le reprocharon que "no hace nada" por resolver los problemas generados por la delincuencia.
Al término de la reunión que mantuvo con familiares del carnicero, el jefe comunal reiteró por su parte las quejas de que las autoridades nacionales "retiraron sin aviso 150" efectivos de seguridad y, por lo tanto, advirtió que "no se puede hacer magia", ya que "la seguridad se construye".
En ese marco, denunció que "esta semana, el delito se disparó" en el distrito y lamentó que "cada vez nos tiran más problemas, sin recursos y con menos autonomía política".
"A los municipios cada vez nos han planteado distintos problemas que no nos corresponden a nosotros. No puede ser que alguien de Buenos Aires defina por 'si o no'", sostuvo, y se refirió a la discusión por la reforma política, reclamando que se defina "qué van a hacer los municipios de aquí en más" respecto a este tema, del que "se desembaraza el poder político", según dijo.
Cáffaro cuestionó la falta de coordinación con el gobierno nacional, aunque destacó la "solidaridad" manifestada por el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, "y de la provincia de Buenos Aires" en general.
En cuanto a la falta de efectivos de seguridad, advirtió que "a las personas no se las puede reemplazar con tecnología".
Por otra parte, reveló que durante el encuentro con los familiares del detenido les aseguró el "acompañamiento de parte nuestra con abogados y el equipo municipal", aunque aclarando que "por supuesto, no nos podemos entrometer en la Justicia, son poderes distintos".
Entre los manifestantes había familiares de víctimas de la delincuencia, como un hermano y un cuñado del carnicero, que quedó preso después de declarar en la fiscalía.
Al grito de "seguridad" y portando pancartas de apoyo al comerciante que hizo justicia por mano propia -aunque el imputado declaró que solo intentó recuperar el dinero y que no quiso matar al delincuente-, los manifestantes hicieron una ruidosa marcha y repentinamente se dirigieron a la sede de la municipalidad, donde había una reunión de concejales con representantes de otras fuerzas vivas de la comunidad.
Sin provocar incidentes pero enfáticamente la gente hizo escuchar sus demandas ante varios concejales presentes.
Allí pronunció un discurso Gabriel, hermano del carnicero, quien dijo que "voy a seguir peleando por mi hermano" y aseguró que "no fue a matar al delincuente sino a buscar lo que es de él".
"Yo necesito una solución y ustedes también la necesitan", enfatizó el muchacho ante la asamblea de vecinos que se congregó dentro del municipio y que reclamó la presencia del intendente y soluciones a las demandas.
"Vine a reclamar por mi hermano y por ustedes; tiene que pasar algo para poder reclamar y no quiero que vuelva a pasar", advirtió Gabriel.
Al finalizar el encuentro y en presencia del intendente, el familiar advirtió: "Mañana espero tener alguna respuesta o solución. Estamos todos cansados de estar así. Los de arriba se dan todos cuenta de lo que está pasando, pero hacen oídos sordos, y no es así".