Buenos Aires.— Los investigadores de los crímenes de los tres empresarios
ejecutados en un descampado de General Rodríguez buscaban ayer conexiones entre las tres víctimas y
un grupo mafioso dedicado a la elaboración de drogas sintéticas descubierto el mes pasado en una
quinta de Ingeniero Maschwitz. Esta acción terminó con nueve mexicanos detenidos el 18 de julio
pasado.
Por eso ayer atrajo la atención que el periodista Cristian Sanz se presentara a
la Justicia a decir que a fines de mayo pasado le había hecho una entrevista a Sebastián Forza, uno
de los tres empresarios acribillados. El periodista dijo que Forza le confesó entonces estar
asustado por una serie de amenazas de muerte recibidas. Según su versión, Forza le habría dicho que
tenía vínculos con mafias de narcotraficantes mexicanos y que desde que se había desvinculado de
ellos, en noviembre de 2007, recibía advertencias anónimas donde le pronosticaban su muerte.
El periodista Sanz fue recibido por el ministro de Seguridad bonaerense, Carlos
Stornelli.
Actividad comercial. También el gobierno nacional enfocó ayer en especial a
Forza, al ratificar que tenía una veintena de causas penales abiertas por adulteración y venta de
medicamentos prohibidos o robados.
El ministro de Justicia de la Nación, Aníbal Fernández, retomó las hipótesis
generadas por los asesinatos, cuyos investigadores presumen están ligados a una venganza del
narcotráfico o al circuito ilegal de fármacos. En el triple crimen, planteó Fernández, "hay mucha
tela para cortar".
El funcionario se refirió así a la segunda de las hipótesis que manejan los
investigadores sobre los asesinatos de Forza, de 34 años, Damián Ferrón, de 37, y Leopoldo Bina, de
35, cuyos cuerpos fueron inhumados ayer en cementerios de la Capital Federal y el Gran Buenos
Aires.
Fernández dijo que Forza tenía unas veinte causas judiciales por esas
actividades ilícitas y destacó que las habría realizado a través de su empresa de distribución de
medicamentos Seacamp SA, que pasó a llamarse luego Sanfor Salud SA y se concursó en febrero de este
año. Dijo que Forza "fue titular de la droguería Baires Med, cuya razón social o nombre de fantasía
era Seacamp SA, que tenía 20 causas penales".
Por este accionar ilícito, el Ministerio de Salud procedió a la inhabilitación
de Seacamp SA a partir de 1º de abril de 2008, dijo Fernández.
Forza y Ferrón, que estaban ligados al negocio de venta de medicamentos, y Bina,
que era publicitario, fueron encontrados acribillados el miércoles en un descampado cerca del
kilómetro 11 de la ruta provincial 6, en la localidad bonaerense de General Rodríguez. Habían
desaparecido el jueves de la semana anterior tras mantener una reunión de negocios.
Según indicó la agencia DyN, una de las causas contra Forza estaba vinculada a
una denuncia del Instituto Nacional de Medicamentos (Iname) en abril del año pasado, a raíz de que
dos mujeres que padecían cáncer de mama se presentaron a centros de salud para que les aplicaran
los remedios que habían comprado.
Sin embargo, los médicos se negaron a suministrárselos porque advirtieron
anomalías y luego se comprobó que eran falsos. Se inició entonces una causa para establecer en qué
laboratorio se falsificaban los medicamentos, para lo cual el fiscal porteño Adrián Giménez pidió
un entrecruzamiento de llamadas de tres empresas, dos de las cuales eran Bairesmed y Seacamp
SA.