Una mujer de 60 años afronta una posible pena de prisión perpetua en un juicio oral por el asesinato de su marido ocurrido en julio de 2020 en la zona noroeste de Fisherton. Se trata de Celina Aidé Herrera, quien se sentó ante un tribunal conformado por los jueces Román Lanzón, Nicolás Vico Gimena e Ismael Manfrín para ser juzgada por el crimen de Roberto Ascurra.
Según confirmaron fuentes judiciales el fiscal de Homicidios Alejandro Ferlazzo pidió ante el tribunal la pena máxima para Herrera por el delito de homicidio calificado por relación de pareja con la víctima por el hecho ocurrido el 5 de julio de 2020 en la casa donde vivía en Urdinarrain al 8400, en el extremo oeste de la ciudad.
Según alegó el acusador, ese día Celina y Roberto habían pasado el día juintos en el cumpleaños de un amigo en común que tenían y al que conocían del ambiente de las peñas folclóricas donde Ascurra solía cantar y se habían conocido. Eran cerca de las 17.30 de ese día cuando volvieron a la casa de ella, donde el hombre de 50 años usualmente se quedaba a los fines de semana.
Tres horas después Celina llamó al 911 y directamente dijo que “había hincado” a su pareja, por lo cual solicitaba la presencia de la policía. Cuando llegaron los uniformados encontraron a Ascurra tirado boca arriba y agonizando. Tenía una herida en el pecho y otra en la cabeza, que habían sido proferidas por un cuchillo que no fue encontrado.
Perspectiva
En su alegado el fiscal sostuvo que lo ocurrido había sido analizado con perspectiva de género y la investigación no había detectado agresiones por parte de la víctima contra la acusada. Y que además Celina había sido examinada por médicos que determinaron que no tenía lesiones.
Por su parte el defensor de la acusada, Jorge Bedouret, presentó una versión distinta. Según los voceros consultados el abogado se opuso al planteo de Ferlazzo, de quien dijo que no había aplicado la perspectiva de género, y describió a su clienta como una mujer que durante toda su vida había sufrido violencia físicas y psicológica por parte de su madre y de sus parejas, entre quienes incluyó a Ascurra.
>>Leer más: Piden prisión perpetua para una mujer que mató a puñaladas a su novio folklorista
Bedouret presentó una teoría del caso según la cual Herrera mató a Ascurra por accidente, al intentar defenderse de una agresión que le dejó lesiones en los brazos y piernas. En ese sentido el defensor solicitó a los jueces la absolución de la acusada.