Facundo Pardo es uno de los juveniles subidos a la primera de Newell’s, con Panchito González y Nicolás Castro. “Este momento es muy importante, porque es el que siempre soñé. Espero ganarme un lugar”, dijo el formoseño de 21 años, que empezó a entrenar con regularidad con el plantel superior para la Copa Superliga. El marcador central repasó su trayectoria, con varias convocatorias a los seleccionados argentinos Sub 15, Sub 17, con el que jugó el Mundial de Chile 2015, y Sub 20.
¿Cómo fueron tus comienzos?
Empecé en Formosa, en la escuelita de fútbol Tataré Oviedo. Tenía menos de cinco años. Me llevaba mi viejo. Después pasé por otras escuelas, Vialito e Independencia. En Independencia, Jorge Bianco (ex jugador de River, Central y Talleres, entre otros) fue a hacer una prueba para la Academia Duchini de Villa Constitución y me eligieron. Era chico y con mis padres decidimos que recién me iría al año siguiente. Cuando fuimos a comunicarles eso, me encontré con que los demás chicos seleccionados se iban todos. Ahí mismo le dije a mi mamá que yo también me iba. Estuve un año en la academia, en 2011, viviendo en la pensión. Hasta que Newell’s me vio y fui a Rosario en 2012.
¿Qué significo llegar a Newell’s?
No tenía idea de nada y me costó. Todavía no me acostumbraba a estar lejos de mi familia. Pero en la pensión hay muchos chicos en la misma situación y ahí aprendés muchísimo. Todo lo que pasé ahí lo repetiría. Estando en la 8ª división, donde no venía jugando siempre, me dijeron que tenía que presentarme en Ezeiza para el seleccionado Sub 15. No lo podía creer. Fui a jugar la Copa de Naciones a México. Nunca había salido del país ni subido a un avión. Fue increíble.
Alguna vez que visitaste a tu familia ¿pensaste en no volver?
Muchas veces. Si bien pasan los años, el lugar de uno siempre tira. Ya hace varios años que estoy acá, pero cada vez que voy hay una parte mía que se quiere quedar.
¿Qué recuerdo tenés de tu paso por las inferiores?
Un partido en 9ª, un clásico. Fue el primero que jugamos los chicos que veníamos de afuera. Nos decían que era diferente a todo y lo tomamos con nervios y a la vez felicidad. Empezamos perdiendo y lo ganamos 2 a 1. Fue la primera sensación linda que tuve en el club y que me sirvió para entender lo que es Newell’s.
¿Siempre fuiste defensor?
Jugué siempre de marcador central, metido atrás. Al principio ocupé ese lugar por la altura. Siempre fui alto. Después le fui agarrando la mano y el gusto al puesto. A veces llegué a hacerlo de cinco. Pero hoy no veo la posibilidad de que juegue en otra posición que no sea atrás.
También fuiste lateral derecho y segundo marcador central.
Sí. Con tal de jugar, soy feliz donde me pongan. Donde me siento más cómodo es de central. En todos estos años jugué de 2 o de 6. Si es por preferencia, elijo jugar de 2, por el tema de la pierna hábil, la derecha.
¿Cuáles son tus características?
Me gusta el juego aéreo, estar firme en la marca y, si se puede salir, también me animo.
Fuiste sparring de la selección argentina en la Copa América de 2015.
Antes de viajar a Chile hablaba con mis amigos que sería algo increíble. Y cuando nos encontramos delante de semejantes jugadores, no lo podía creer. Cuando llegaron unos días más tarde Messi, Mascherano y Tevez, porque venían de jugar la final de la Champions de Barcelona y Juventus, quedamos impactados frente a ellos. Tevez fue uno de los que más se acercaba a charlar con nosotros, también el Kun (Agüero). Banega hablaba también conmigo, porque sabía que era de Newell’s.
¿Qué objetivo te planteas para esta temporada, ante la chance de entrenar con la primera?
Me lo tomo con tranquilidad y también con alegría y mucha responsabilidad. Este momento es muy importante, porque es el que siempre soñé. Con el paso de los años me hice hincha del club. Voy paso a paso, con el deseo de ganarme un lugar. Con el plantel de primera empecé a entrenar antes de que termine el torneo (Copa Superliga). Allí estaban Jero Cacciabue y Julián Marcioni, con quienes hemos jugado siempre en inferiores, y eso hizo que todo me resultara más fácil.
¿Te imaginás jugando con público en el Coloso?
Siempre lo soñé. Desde que estoy en Newell’s voy siempre a la cancha. Me parece que las cosas que se viven ahí adentro son únicas. Me imagino que jugar en el Coloso debe ser una locura.