"Zurdas asquerosas", se lee en una de las pintadas y sobre el nombre "Biblioteca Popular Lesbofeminista", una versión del ojo que todo lo ve, en aerosol y las palabras "Cristo vence", más una cruz y la "V". Las agresiones que las integrantes de la organización comunitaria Las Sxfinas denunciaron como "de odio", en la comisaría Nº2 y en la Fiscalía, se pueden aún leer este lunes en Pje. Fabricio Simeoni 1158, donde desde 2019 se ubica La Vulvería.
"No son las primeras amenazas que recibimos, nosotras o el espacio", dijo María Eugenia Sarrias, integrante de Lxs Safinas, a La Capital.
Es que hace dos años cuando participaban de un encuentro en La Casa LGTB (Córdoba 3650), en el marco de un convenio sobre violencia entre pares, un vecino las había amenazado: "Las voy a quemar a todas con cinco bidones de nafta".
"Lo denunciamos pero ninguna nada prosperó, queremos que se investigue si hay vinculación entre los casos", dijo Sarrias, quien describió a la pintadas últimas relacionadas con "la masonería y los vuelos de la Revolución Libertadora" aunque cree que lo que molesta "y llena de odio es la posición de las lesbianas al ampliar visiones de la mujer, visibilizar nuestra identidad y ser partícipes del próximo Encuentro Plurinacional de Mujeres en San Luis".
De este modo, Sarrias se refirió a una de las dos convocatorias, tras 35 años de un encuentro siempre unificado. Por un lado, está el que se celebra el 8, 9 y 10 de octubre como "35 Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bixesuales, Intersexuales y No Binaries" al que asistirán Lxs Safinas y por otro está el organizado por el Partido Comunista Revolucionario (PCR) entre otros, para noviembre.
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Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital
"Nos atacan porque algunos y algunas no quieren ni nombrarnos, y en momento de avanzadas de la derecha, como en Italia donde ganó este fin de semana Giorgia Meloni, esto debería reverse. Las Lesbianas rompemos con el héteropatriarcado, nuestro objeto de deseo no es el varón y la forma de vivir nuestros vínculos y ser madres es diversa. Pero además tenemos particularidades de género que la ley no considera: si hay violencia entre dos lesbianas, si no son pareja, no se considera el caso, para que sea considerada violencia debe el victimario ser varón", dice Sarrias.
La Vulvería o "espacio de tortas irreverentes" nació hace tres años. Goza de un inmueble municipal en comodato que estaba abandonado y este grupo lésbico reconstruyó para talleres, asistencia alimentaria, y una biblioteca, la Mirta Rosemberg.
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Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital
El espacio funciona los lunes, jueves y viernes de 16 a 20 y los martes, de 14 a 17, para escucha y acompañamiento de la problemática lésbica de quien quiera ingresar. Y los sábados, de 14 a 19, hay feria "Paseo de los encantos diversos", en Paraguay y el río. Además, en breve sumará actividad y asesoramiento profesional a un centro de día.
Por su parte, Lxs Safinas son un grupo de lesbianas que nació tras el encuentro de 2003 de Mujeres en Rosario.
"Tenemos 19 años de trabajo para hablar de la realidad de las lesbianas, en espacios de mujeres o LGTBI, tenemos nuestra agenda y espacio propio, queremos que se tome en serio nuestra denuncia, no merecemos estas amenazas", concluyó Sarrias.
Otra agresión
Esta agresión a la diversidad sexual no es la primera. Ya se habían destruido en más de una ocasión las placas del Paseo de la Diversidad, en Corrientes y el río. En 2020, la del homenaje al activista iberoamericano Pedro Zerolo.
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Y hace solo un mes destruyeron en el mismo lugar la placa de conmemorativa de la salteña Lohana Berkins, activista travesti.
"Hasta cuándo el silencio?", se preguntó el histórico militante por la diversidad Guillermo Lovagnini refiriéndose a los partidos políticos que como siempre están por el voto redituable llenos de hipocresía. Yo recuerdo siempre la frase de ese gran alemán Bertold Brecht cuando decía que comenzaron por los otros y ahora me toca a mí. Ejemplo son las elecciones en Italia".