Una ola de calor con pocos precedentes asola en estos días a todo el hemisferio norte. El calentamiento global es el acusado por los científicos de estos extremos, que muchas veces superan los 45 y 50 grados. China y casi toda Asia, Estados Unidos y Europa sufren el castigo del calor extremo. En el interior de California se rompió el récord mundial de calor: se registraron 56 grados en el terrible Valle de la Muerte.
En Sinkiang, en el árido noreste de China se registraron temperaturas de 52°grados, la temperatura más alta de la que se tiene registro en la nación asiática. Se espera que el calor extremo se extienda por al menos otros cinco días en esta región. El récord anterior en China, registrado en 2015, fue de 50,3° grados.
En tanto, en EEUU, casi una cuarta parte de la población está bajo aviso de calor extremo a lo largo y ancho del país. En El Paso, Texas, las temperaturas se mantuvieron sobre los 38 grados durante 32 días consecutivos, lo que sobrepasa el récord anterior de 26 días.
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Un incendio de vegetación nativa en California, que ostenta la temperatura récord de EEUU en el Valle de la Muerte.
Científicos muestran preocupación porque en Arizona las temperaturas ni siquiera descienden durante la noche. En el estado el termómetro no baja de los 32°C cuando cae el sol. La temperatura media de julio durante el último siglo en Arizona por la noche fue de 18,5 grados, con una baja diaria pronunciada dado que el estado posee un clima muy seco. Ahora este patrón histórico dejó de funcionar.
Record heat in Death Valley in the USA, reached 56 °C (133 °F)
En el Valle de la Muerte, en California, se rompió el récord de calor jamás registrado en la Tierra. Este domingo el mercurio llegó a los 53 grados, lo que generó una enorme ola de turistas, ante la expectativa de que se rompiera el hito de 56°C de 1913. Finalmente, este lunes el récord fue roto y los visitantes estaban para registrarlo. Los visitantes posaban ante el cartel del termómetro digital gigante, que registra la temperatura en grados Farenheit y centígrados. Durante horas la máxima fue creciendo hasta que llegó a los 56 grados. El récord de 1913 fue igualado y minutos después, superado.
Pero más allá del turismo, el calor extremo y seco causa incendios forestales en gran parte de California y otros estados del oeste norteamericano.
El Servicio Meteorológico Nacional de EEUU pronostica episodios de “clima inestable”, incluidas lluvias excesivas que pueden provocar inundaciones repentinas en Luisiana y Arizona, Ohio y los estados del noreste.
En Europa, en especial en el sur del continente, las cosas no están mejor. España, Italia y Grecia sufren de temperaturas extremas desde hace días. Esta semana se espera una nueva ola de calor que las agencias del tiempo italianas llaman "Caronte", como el monstruo de la mitología griega que era el barquero de los muertos en el Hades. Este monstruo de calor se mueve desde el norte de África hacia Italia. En las islas de Cerdeña y Sicilia se proyectan temperaturas de 46°C. La temperatura más alta registrada en Europa fue 48.8° grados, precisamente en Sicilia, en agosto de 2021.
Se prevé que la ola de calor del Mediterráneo se intensifique a mediados de esta semana y es probable que continúe hasta el próximo mes en algunas partes de Europa.
El norte de África también está experimentando altas temperaturas, con un pronóstico de hasta 49°C en Marruecos.
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Imparables, los turistas no se detienen pese al calor extremo de Atenas y suben al Partenón.
Más hacia el este en Europa, Grecia padece como pocas veces el calor extremo. Unos 1.200 niños fueron evacuados de un campamento de verano en la ciudad costera de Loutraki, después de que se iniciara un incendio forestal potenciado por el clima seco. La policía arrestó a un sospechoso de iniciar otro incendio en Kouvaris, al sureste de Atenas.
El servicio meteorológico griego advirtió que el riesgo de nuevos fuegos sigue siendo alto. Decenas de personas han tenido que abandonar sus casas, asistidas por equipos de servicios de emergencia, por el avance de incendios forestales fuera de control.
La propietaria de una casa en Kouvaras, Anna Vlachou, dijo a la agencia Reuters que, si bien su casa aún no se había quemado, había “muchos frentes” de incendio y aún no había señales de los bomberos. Los incendios forestales fueron avivados por fuertes vientos, con cientos de bomberos luchando para contener la propagación de las llamas.
En Atenas, en tanto, los turistas hacen fila para visitar el Partenón, pese al intenso calor y el sol implacable. La región alcanzó hasta 41 grados de temperatura máxima. Las autoridades deben asistir todos los días a numerosos desmayados o personas que padecen cuadros de deshidratación. Pese al peligro, los turistas no dejan de hacer fila para llegar al Partenón. Algo similar ocurre en Roma, también afectada por la ola de calor.