Más de 70 personas murieron ayer y al menos 30 resultaron heridas como consecuencia de un motín en una cárcel de la Policía de Carabobo, en el norte de Venezuela, informaron fuentes extraoficiales y medios de prensa locales.
Más de 70 personas murieron ayer y al menos 30 resultaron heridas como consecuencia de un motín en una cárcel de la Policía de Carabobo, en el norte de Venezuela, informaron fuentes extraoficiales y medios de prensa locales.
"Reportan más de 70 fallecidos en comandancia de Policarabobo", afirmó el director del capítulo venezolano de la organización humanitaria Amnistía Internacional, Marcos Gómez, en su cuenta de Twitter.
El diario digital Runrunes reportó que "cerca de 80 reclusos perdieron la vida y más de 30 resultaron heridos, entre ellos dos funcionarios policiales, durante un motín y un incendio que se desató" ayer a la madrugada "en los calabozos de la sede de la comandancia de Policía", en Valencia, capital del estado de Carabobo.
"Extraoficialmente se pudo conocer que entre los fallecidos se encontrarían 66 hombres y dos mujeres, cuyas identidades no fueron suministradas", dijo el periódico, aunque agregó que "otras fuentes indican que serían 78 los fallecidos, entre ellos diez mujeres". Después del motín, varias decenas de familiares -ayer era día de visitas conyugales, según el diario El Carabobeño- aguardaron frente a la comandancia policial en espera de información, una situación que se tornó violenta y derivó en lanzamiento de gases lacrimógenos por parte de una veintena de efectivos de la policía.
Madres, esposas, hermanas e hijos se mostraron desesperados por la falta de información, y destacaron que había varios heridos por quemaduras y asfixia.
Varios de los reclusos heridos fueron trasladados a hospitales cercanos, aseguraron familiares citados por los medios locales.
"No nos han dicho nada; pido que las fuerzas del orden no los traten como perros, que no les lancen gasolina, les lanzaban plomo (disparaban) para adentro como si ellos fueran perros", imploró a periodistas Lissette Mendoza, madre de un recluso de 19 años.
Según medios venezolanos, varios funcionarios obligaron a periodistas a eliminar material y les quitaron sus equipos.