La Corte Europea de Derechos Humanos condenó ayer a Francia por impedir que adoptara un niño una
lesbiana que vivía en pareja.
Según el Tribunal, la mujer, de 45 años, fue víctima de discriminación y
por eso se condenó al Estado francés a pagarle una indemnización de 10.000 euros por daño moral.
La decisión podría tener un gran impacto para aquellas personas
homosexuales que planteen adoptar niños.
Es la primera vez que la Corte condena a uno de los 47 Estados del
Consejo de Europa por discriminación de carácter homosexual en una demanda de adopción, según
indicó un portavoz calificado del Tribunal internacional.
Los magistrados del tribunal, por 10 votos contra 7, consideraron que
Francia cometió discriminación contra la denunciante debido a su orientación sexual, así como una
violación del respeto de la vida privada y familiar.
La sentencia de la Corte dio la razón a la mujer francesa, profesora de
una escuela infantil, que se quejó de que su solicitud de adopción fue rechazada por su condición
sexual.
Los jueces estimaron que tal discriminación, que afecta al respeto a la
vida privada y familiar, no se puede justificar más que por “razones particularmente graves y
convincentes”.
“Ahora bien (sostiene la sentencia, esas razones no existen en el
caso, dado que el derecho francés autoriza la adopción de un niño por un soltero, abriendo así la
vía a la adopción por parte de una persona soltera homosexual”.
La profesora vio cómo el Consejo general de Jura, la región en la que
vive, denegaba su solicitud de adopción en 1998. El consejo invocaba la falta de “referentes
de la identidad” debido a la ausencia de un referente paterno y por la ambigüedad de la
pareja de la solicitante, con la que mantenía una relación desde 1990.
Las demás instancias superiores de la jurisdicción francesa, incluyendo
el Consejo de Estado en 2002, confirmaron el rechazo de la solicitud de adopción y estimaron que la
decisión no estaba fundada en la condición de la solicitante, sino que se habían tenido en cuenta
las necesidades y el interés del niño.
Agotada la vía judicial en Francia, la profesora se dirigió a la Corte,
ante la que denunció una violación de los artículos 8 (derecho al respeto a la vida privada y
familiar) y 14 (prohibición de discriminación) de la Convención Europea de los Derechos del Hombre,
que ahora le dio la razón.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos es también denominado Tribunal
de Estrasburgo y Corte Europea de Derechos Humanos. Tiene su sede en la ciudad de Estrasburgo, a
orillas del río Ill, norte de Francia.
Antecedente. Un antecedente cercano sobre el fallo de la mujer francesa fue el
caso de un lituano que no podía completar el proceso de cambio de sexo debido a un vacío legal.
El 9 de septiembre de 2007, la Corte avaló el pedido del transexual y
señaló en su fallo que Lituania debía adoptar una ley sobre reasignación de género dentro de tres
meses o pagar 55.300 dólares al demandante para que se someta a una cirugía de cambio de sexo en el
extranjero. El hombre como mujer en 1978. (Télam)