El primer ministro italiano, Mario Draghi, deberá decidir este miércoles si rectifica o ratifica la renuncia que presentó la semana pasada y que fue rechazada por el presidente Sergio Mattarella. La crisis deja a Italia a un paso de ir a nuevas elecciones anticipadas, lo que sería el prólogo a un gobierno de derecha, en lugar de la coalición “multicolor” que respalda hoy a Draghi. La renuncia del premier el pasado jueves causó la reacción de más de 1.000 alcaldes, cien mil ciudadanos y de las más importantes cooperativas de Italia, que reclamaron mediante un petitorio para que siga en el cargo.
La crisis fue desencadenada por el Movimiento Cinco Estrellas (M5E), que el jueves pasado votó contra el gobierno en el Senado. Posteriormente, el domingo, los partidos Forza Italia y La Liga anunciaron que saldrían de la coalición de gobierno en repudio a la conducta del M5E, algo que dejaría a Draghi en minoría y forzaría el llamado anticipado a las urnas. A la vez, el M5E sufre una crisis interna causada por la ruptura con el gobierno, lo que podría ser la llave para que el premier siga en el cargo.
La crisis en el M5E, que inició la crisis de gobierno el jueves pasado al negarle el voto al gobierno en el Senado, podría llevar a una escisión interna, que sería la segunda que sufre en poco tiempo el siempre agitado movimiento populista. Draghi se presentará mañana en el Parlamento para definir su futuro luego de la renuncia que presentó disconforme con la falta de apoyo impulsada desde el M5E por el expremier Giuseppe Conte, máximo líder de los Cinco Estrellas. Esta es la segunda fuerza más numerosa de la coalición oficialista. Pero la falta de sus votos no forzaría a Draghi a renunciar, dada la holgura de su coalición, por esto es que el presidente Mattarella le pidió que retirara su renuncia.
Sin embargo, el domingo esto pareció cambiar, cuando Forza Italia, de Silvio Berlusconi, y la Liga, liderada por Matteo Salvini, afirmaron en un comunicado conjunto que podían abandonar la coalición. En el texto “descartan la posibilidad de seguir gobernando con el M5E por su incompetencia y falta de fiabilidad”. Puede interpretarse como un llamado a seguir gobernando sin los 5 Estrellas o bien, caso contrario, a ir a unas elecciones anticipadas. Ocurre que las dos fuerzas políticas de derecha tienen un aliado importante fuera del gobierno: el partido nacionalista y conservador Hermanos de Italia, de Giorgia Melloni, que aparece primero en los sondeos y puja abiertamente por ir a las urnas. La hipótesis es que se cree un Ejecutivo con estos tres partidos de derecha, dejando afuera no solo a los M5E, sino también a los socialdemócratas del Partido Democrático (PD) y a socios menores de Draghi.
A esta tentativa se opone la de los que pujan por continuar con Draghi y ven la chance de una ruptura en el M5E. “Estamos trabajando para poder dar forma a una nueva mayoría con los partidos que sosteníamos a Draghi desde el inicio y con un sector del Cinco Estrellas que plantea su lealtad al premier y no a Conte y estaría dispuesto a una escisión”, sostuvo a la agencia argentina Télam un legislador del Partido Democrático (PD). En esta hipótesis, ya no se considera como indispensable la presencia del M5E en una eventual continuidad del premier. Se estima que hay entre 20 y 30 legisladores del M5E rebeldes y dispuestos a descatar a Conte.
El Cinco Estrellas rechazó participar el jueves pasado de un “voto de confianza” al gobierno en el Senado, mientras se trataba un paquete de medidas económicas y sociales por 26 mil millones de euros. Quebró así la cohesión del Ejecutivo, iniciado en febrero de 2021 en base a una coalición de “unidad nacional” con fuerzas de centro, izquierda y derecha que Mattarella le había encargado a Draghi.
Draghi explicará este miércoles a las dos Cámaras los motivos de su renuncia y luego se hará un voto de confianza en cada una, informó el presidente de Diputados en una reunión de jefes de bloque. La confirmación de que habrá un voto de confianza al premier era vista por algunos legisladores como un indicador de que se mantienen las chances de que continúe en el cargo.
Después de largas deliberaciones para determinar si Draghi hablará primero en el Senado, en donde le correspondería por ser la Cámara en la que obtuvo su primer voto de confianza, o si empieza por Diputados, en donde tiene un panorama más favorable, se definió que lo haga en la Cámara alta. Forza Italia mantiene su hostilidad al M5E: “Exigimos estabilidad para el país, estabilidad que no se puede tener con los M5E en el gobierno. La solución es un gobierno de Draghi sin los 5 Estrellas o vamos a votar”, dijo el coordinador de FI, Antonio Tajani, en un aparte de una reunión con Silvio Berlusconi.
“La decisión no corresponde ahora a los M5E, sino al primer ministro Draghi”, sostuvo Giuseppe Conte en una asamblea de legisladores de su partido. Pero ahora muchos esperan una probable ruptura del Cinco Estrellas, por la que al menos unos 20 legisladores podrían abandonar a Conte para sumarse al grupo “Juntos por el Futuro”, creada a mitad de junio como escisión del M5E por el canciller de Draghi, Luigi Di Maio. Este rompió con el M5E y Conte porque estos son contrarios a la política de Draghi de solidaridad activa hacia Ucrania. El M5E tiene lazos históricos con el régimen del presidente ruso Vladimir Putin. Dentro del grupo que analiza romper con Conte están dos de los tres ministros que el M5E tiene en el gobierno.
Fuerte movilización de la sociedad civil
En tanto, el premier Mario Draghi recibe intensos respaldos desde la sociedad civil. Más de 1.000 alcaldes de toda Italia ya firmaron una carta en la que le piden a Draghi que “siga adelante y explique al Parlamento las buenas razones que imponen que la acción de gobierno continúe”.
El mundo asociativo italiano lanzó asimismo un “llamamiento al primer ministro Mario Draghi y a las fuerzas políticas que le han apoyado para evitar una crisis de gobierno”. Expresan una “profunda y sincera preocupación”, subrayan que “el drama del momento y las numerosas demandas de dignidad de la sociedad no necesitan una crisis porque se verían aún más comprometidas”. El documento está firmado por las principales cooperativas, muy numerosas y activas en Italia, además de Acción Católica y la Liga Ambiente, entre otras muchas asociaciones civiles. Con el mismo pedido, cerca de 90 empresarios plantearon su apoyo a la continuidad del premier. Además, rectores de universidades y profesionales de distintos ámbitos lanzaron iniciativas similares.
La fuerza oficialista Italia Viva, nacida en 2019 como una escisión del Partido Democrático guiada por el expremier Matteo Renzi lanzó también una campaña de firmas para pedirle a Draghi que continúe en el cargo que ya obtuvo más de 80.000 firmas. Este lunes continuaba la suma de firmas en las calles de Roma y de otras ciudades italianas.
Antes del rechazo de Giuseppe Conte a votar la confianza al premier, Draghi había insistido en que no ve posible “un gobierno sin el Movimiento Cinco Estrellas”. Pero esto podría cambiar este miércoles, si Draghi consigue al menos una parte de los votos parlamentarios del M5E. Hasta la semana pasada, incluyendo a todo el Movimiento Cinco Estrellas, el gobierno contaba como propios a 449 diputados sobre 630 y a 203 senadores de los 321.