Un hombre de 38 años fue detenido ayer como presunto integrante del duo que asaltó la sucursal
de la financiera Confina en Villa Gobernador Gálvez y asesinó de un disparo en el pecho al cabo 1º
Marcos Zanuttini. El sospechoso habría admitido su participación en el episodio en una charla que
mantuvo con una mujer que trabaja en una whiskería ubicada al sur de Rosario y la policía lo detuvo
cuando aún estaba en el local y fue alertada desde el mismo comercio.
Un supuesto cómplice de esa persona, un muchacho de unos 20 años, fue
rastreado por la policía hasta en una casa de Villa Constitución, pero sin resultados positivos. La
pesquisa tendiente a ubicar a los autores del crimen derivó entre el viernes y el sábado en la
realización de ocho allanamientos judiciales, la mayoría concretados en Rosario.
Primer paso. A todo esto, las dos personas que habían sido demoradas anteanoche recuperaron
la libertad, ya que no se pudo probar que tuvieran alguna vinculación con el episodio. Uno era el
titular registral de la moto Honda Fan en la que los asesinos de Zanuttini llegaron hasta el local
de la financiera de Villa Gobernador Gálvez y que dejaron abandonada tras cometer el crimen. El
otro era un automovilista que había dejado su Volkswagen Golf verde estacionado y en marcha en el
semáforo de San Martín y Juan Perón e ingresó a un comercio situado cerca de la empresa asaltada.
La primera novedad contundente sobre el caso surgió a primera hora de la
mañana de ayer. Desde un local nocturno ubicado sobre el kilómetro 4 de la ruta A-012, en
jurisdicción de Pueblo Esther, llamaron a la policía para avisar que un cliente le había confesado
a una empleada que había participado en el asalto que terminó en homicidio. Enseguida llegaron
hasta ese lugar efectivos del Comando Radioeléctrico de la región y de la seccional de ese pueblo.
De esa forma, Miguel P., de 39 años, se transformó en el primer detenido por el asesinato de
Zanuttini.
El sospechoso quedó alojado más tarde en la seccional 29ª y el martes el
juez de Instrucción Jorge Baclini le tomaría declaración indagatoria bajo la acusación preliminar
de homicidio en ocasión de robo.
Tras ello, los investigadores de la Brigada de Homicidios de la Unidad
Regional II y de la seccional 29ª comenzaron a seguir la pista de la moto usada por los asesinos.
Descartada en principio la participación de la persona que figuraba como dueño ante el Registro
Nacional de la Propiedad Automotor, los detectives obtuvieron datos sobre el hombre que compró ese
vehículo hace unos dos meses. Así establecieron que se trata de un muchacho cuyo apodo es Johnny,
que tiene unos 20 años y que vive en la zona sur de Rosario. La policía hizo contacto con sus
familiares, quienes declararon que el joven estaba ausente de su casa desde el día del crimen, es
decir desde el jueves a la tarde.
Dos ruedas. En esa línea investigativa, allegados al caso establecieron que Johnny podría
estar en la casa de unas personas allegadas a su familia que viven en Villa Constitución. Una
comisión policial integrada por efectivos de Homicidios de Rosario, de la seccional 29ª y de la
Tropa de Operaciones Especiales, con el apoyo de uniformados locales, llegaron ayer a la tarde con
una orden judicial para requisar una vivienda de 25 de Mayo al 800 de aquella ciudad. Pero el
muchacho no estaba allí y los moradores del lugar dijeron no tener idea de dónde podría
encontrarse.
Los investigadores aseguraron anoche que Johnny era el sospechoso
principal hasta el momento, aunque no pudieron precisar si tenía alguna relación con el hombre
detenido en la whiskería de Pueblo Esther. “Todo esto es muy preliminar. Johnny pudo comprar
esa moto, pero no quiere decir que haya cometido el crimen. Es un dato que hay que
profundizar”, se sinceró un pesquisa de la policía rosarina. l
Un hombre de 38 años fue detenido ayer como presunto integrante del duo que asaltó la
sucursal de la financiera Confina en Villa Gobernador Gálvez y asesinó de un disparo en el pecho al
cabo 1º Marcos Zanuttini. El sospechoso habría admitido su participación en el episodio en una
charla que mantuvo con una mujer que trabaja en una whiskería ubicada al sur de Rosario y la
policía lo detuvo cuando aún estaba en el local y fue alertada desde el mismo comercio.
Un supuesto cómplice de esa persona, un muchacho de unos 20 años, fue
rastreado por la policía hasta en una casa de Villa Constitución, pero sin resultados positivos. La
pesquisa tendiente a ubicar a los autores del crimen derivó entre el viernes y el sábado en la
realización de ocho allanamientos judiciales, la mayoría concretados en Rosario.
Primer paso. A todo esto, las dos personas que habían sido demoradas anteanoche recuperaron
la libertad, ya que no se pudo probar que tuvieran alguna vinculación con el episodio. Uno era el
titular registral de la moto Honda Fan en la que los asesinos de Zanuttini llegaron hasta el local
de la financiera de Villa Gobernador Gálvez y que dejaron abandonada tras cometer el crimen. El
otro era un automovilista que había dejado su Volkswagen Golf verde estacionado y en marcha en el
semáforo de San Martín y Juan Perón e ingresó a un comercio situado cerca de la empresa asaltada.
La primera novedad contundente sobre el caso surgió a primera hora de la
mañana de ayer. Desde un local nocturno ubicado sobre el kilómetro 4 de la ruta A-012, en
jurisdicción de Pueblo Esther, llamaron a la policía para avisar que un cliente le había confesado
a una empleada que había participado en el asalto que terminó en homicidio. Enseguida llegaron
hasta ese lugar efectivos del Comando Radioeléctrico de la región y de la seccional de ese pueblo.
De esa forma, Miguel P., de 39 años, se transformó en el primer detenido por el asesinato de
Zanuttini.
El sospechoso quedó alojado más tarde en la seccional 29ª y el martes el
juez de Instrucción Jorge Baclini le tomaría declaración indagatoria bajo la acusación preliminar
de homicidio en ocasión de robo.
Tras ello, los investigadores de la Brigada de Homicidios de la Unidad
Regional II y de la seccional 29ª comenzaron a seguir la pista de la moto usada por los asesinos.
Descartada en principio la participación de la persona que figuraba como dueño ante el Registro
Nacional de la Propiedad Automotor, los detectives obtuvieron datos sobre el hombre que compró ese
vehículo hace unos dos meses. Así establecieron que se trata de un muchacho cuyo apodo es Johnny,
que tiene unos 20 años y que vive en la zona sur de Rosario. La policía hizo contacto con sus
familiares, quienes declararon que el joven estaba ausente de su casa desde el día del crimen, es
decir desde el jueves a la tarde.
Dos ruedas. En esa línea investigativa, allegados al caso establecieron que Johnny podría
estar en la casa de unas personas allegadas a su familia que viven en Villa Constitución. Una
comisión policial integrada por efectivos de Homicidios de Rosario, de la seccional 29ª y de la
Tropa de Operaciones Especiales, con el apoyo de uniformados locales, llegaron ayer a la tarde con
una orden judicial para requisar una vivienda de 25 de Mayo al 800 de aquella ciudad. Pero el
muchacho no estaba allí y los moradores del lugar dijeron no tener idea de dónde podría
encontrarse.
Los investigadores aseguraron anoche que Johnny era el sospechoso
principal hasta el momento, aunque no pudieron precisar si tenía alguna relación con el hombre
detenido en la whiskería de Pueblo Esther. “Todo esto es muy preliminar. Johnny pudo comprar
esa moto, pero no quiere decir que haya cometido el crimen. Es un dato que hay que
profundizar”, se sinceró un pesquisa de la policía rosarina. l