El Cairo. - Manifestantes se enfrentaron ayer a la policía antidisturbios cerca del Ministerio del Interior de Egipto en El Cairo, en el segundo día de revueltas instigadas por la muerte, el miércoles, de 74 personas en el peor desastre futbolístico del país. La violencia se generalizó en Egipto con enfrentamientos en El Cairo, Alejandría y Suez, que dejaron un saldo de al menos cinco muertos, incluido un oficial, y casi 2.000 heridos.
En Alejandría, miles de personas también salieron a las calles desafiando el voluminoso despliegue policial y del ejército para protestar contra los militares y solidarizarse con familiares e hinchas del club de fútbol cairota Al Ahly, frente a la Dirección de Seguridad del Estado. Una oficina del gobierno fue saqueada y luego incendiada por grupos enardecidos en El Cairo. Según testigos, la policía usó munición real para disperzar a los revoltosos.
Las protestas estallaron tras las muertes ocurridas en un estadio de fútbol, el miércoles. La mayoría de las víctimas murieron aplastadas en una estampida, pero los manifestantes atribuyen la responsabilidad a las autoridades militares. Se trata del incidente con más muertos desde las revueltas que derrocaron a Hosni Mubarak hace casi un año.
Sin banderías. Acostumbrada a los colores de la bandera nacional (rojo, blanco y negro), la emblemática plaza Tahrir se tiñó ayer de tonos naranja y blanco por la afluencia de manifestantes y vendedores con banderas de los clubes Al Ahly de El Cairo y Zamalek de Port Said, para honrar a los 74 fallecidos en el partido de fútbol que ambos equipos disputaron.
En una caldeada sesión parlamentaria, varios diputados pidieron ayer la renuncia del ministro del Interior, y responsabilizaron a la Junta Militar de los hechos. Cerca de 1.700 personas resultaron heridas en los enfrentamientos que estallaron el jueves en El Cairo y 207 en Suez, dijo el Ministerio de Salud, muchos de ellos por inhalación de gases lacrimógenos disparados por la policía antidisturbios que protegían el edificio.
Las muertes del estadio de fútbol han provocado nuevas críticas contra el consejo militar que ha gobernado Egipto desde que Mubarak renunció hace un año ante las masivas protestas. Sus críticos los consideran parte de su régimen y un obstáculo para el cambio. El liderazgo militar, a su vez, se ha presentado como los guardianes de la "revolución del 25 de enero". Prometieron entregar el poder a un presidente electo a fines de junio.
Turistas liberadas. En tanto, dos turistas estadounidenses que habían sido secuestradas durante la mañana de ayer en la península egipcia del Sinaí por hombres armados fueron liberadas y están ya en manos del ejército. Las dos formaban parte de un grupo de cinco personas que viajaba desde el monasterio de Santa Caterina, en el centro del Sinaí, a la ciudad balneario de Sharm el Sheikh, sobre el mar Rojo. Según el jefe de seguridad de la provincia de Sinaí del Sur, Mohammed Naguib, el grupo de turistas se encontraba de regreso del Monasterio de Santa Catalina cuando hombres armados y enmascarados detuvieron su vehículo y robaron a los cinco pasajeros. Además de dinero y celulares, se llevaron las armas de la policía que acompañaba el contingente. Finalmente, los ladrones huyeron con las dos rehenes para después liberarlas.
La seguridad en el Sinaí se deterioró desde que Mubarak fue derrocado. La costa sur del Sinaí, es un importante centro turístico, y este secuestro fue otro golpe a una industria que fue devastada por la agitación política de Egipto.
Hace unos días, un grupo de beduinos secuestró allí a 25 chinos para lograr la liberación de parientes suyos que se encontraban en prisión. Quince horas más tarde, los trabajadores chinos fueron liberados.