La ordenanza 7.180 del 2001 estipuló que todas las concesiones municipales en espacios públicos tienen la obligación, según los pliegos de adjudicación, de prestar el servicio de sanitarios de manera gratuita. Pero muchos vecinos, en el marco de altas temperaturas y la búsqueda del aire libre, denuncian que no suelen estar en las mejores condiciones de higiene, con olores, suciedad y desechos humanos directamente en el piso. El poder de control, en estos casos, es de la Municipalidad, que además impulsa la realización de picnics nocturnos, pero no garantiza el derecho al uso de un sanitario.
Algunos bares concesionados tienen el baño público separado, y los otros deben dejar pasar libremente a los visitantes. Pero a veces sucede que están cerrados porque en ciertos días muy concurridos, como domingos o feriados, se rompen o se corta el agua. ¿Vándalos irresponsables o falta de mantenimiento? Quizás sean ambas razones, pero lo cierto es que mucha gente se ve empujada a pedir permiso en un bar común, que no están obligados a dejar ingresar clientes por ser espacios privados de acceso público.
Después de la pandemia se ha disparado notablemente la demanda de los vecinos por sobre los espacios verdes. El hábito de maximizar el uso de los lugares públicos se ha quedado. Todavía se ven fiestas de cumpleaños, reuniones familiares y de amigos, y personas practicando deportes individualmente o en grupo. Esto también profundizó la necesidad de baños públicos, que están desperdigados por diferentes zonas de mucha circulación, pero en algunos casos están en malas condiciones de aseo o directamente cerrados.
Algunas de las concesiones que deben tener baños públicos son Río Mío (en el parque de las Colectividades, Illia y Dorrego); el bar Flora (presidente Roca y el río); Quillagua (en el parque España, Entre Ríos y el Río); Tea Connection (Oroño y avenida Estanislao López); el bar VIP (Rioja y Alem); El Charladero (Jujuy 1370); Davis (bajo el museo Macro en el parque Sunchales); el Bar del Lago (parque Independencia); Don Ferro (Arturo Illia 1690); Quita Pena (Corrientes 11) y Patagonia, pegado a la Casa del Tango.
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En breve se sumarán dos que están en obras en el parque Urquiza: el del anfiteatro y el ex bar Le Park, que reabrirá como Lemon Park (a la altura de 3 de Febrero, junto a la estación Rosario Este). En la misma zona, un par de cuadras hacia el norte, hay otro: en avenida de la Libertad y Necochea, abajo del ex bar Munich, donde hoy hay un pequeño complejo gastronómico con Lemmy's Pizzas, heladería Gianduia y Queens Deck Eventos. Ytambién deben cumplirlo los cuatro bares que están en la Rambla Catalunya: Caracolas, Mordisco, Patagonia, y Paradiso.
El reclamo ha hecho eco repetidamente en el Concejo. Concejales de distintas fuerzas políticas como Carlos Cardozo (JxC), Lisandro Cavatorta (PJ) o Caren Tepp (Ciudad Futura) han pedido de manera permanente que la Municipalidad haga cumplir las exigencias de los pliegos a los concesionarios. Incluso, ante repetidos incumplimientos, solicitaron que se apliquen las sanciones estipuladas por la ordenanza N° 9585/16, que van desde 300 a 500 unidades fijas (de 27.045 a 45.075 pesos), hasta una posible caducidad definitiva de la concesión.
Inversión estatal
El tema no es nuevo. En 2013, para paliar el déficit de estos espacios en espacios verdes, el municipio comenzó a construir sanitarios con arquitectura moderna y diseño antivandálico, con apliques de cromo empotrados para evitar robos y destrozos. Uno está frente al laguito del parque Independencia, cerca de las boleterías de El Jardín de los Niños. También hay uno en el parque Scalabrini Ortiz (avenida Central Argentino entre Venecia y Thedy) y el Monumento a la Bandera, bajando la escalera frente al acceso a la sala de las banderas de América. El último fue construido en 2014.
Estos baños están en manos de cooperativas contratadas por la Municipalidad, a las que se les da un presupuesto para que hagan la apertura en ciertos horarios establecidos, la higiene permanente y el mantenimiento. Las colaboraciones son simbólicas: suelen tener en el ingreso una alcancía para que el que quiera deje algo en beneficio de la cooperativa, en su mayoría formadas por personas desempleadas. Pero no abren 24 horas: cuando no hay quien los cuide, se cierran y los horarios nunca quedan claros.
Los del parque Alem no son de los más nuevos, pero Parques y Paseos los ha reacondicionado. En el parque Regional Sur hay baños, pero los usuarios reclaman que falta mantenimiento. En el parque Irigoyen, parque de la Cabecera, y en la plaza Montenegro y la plaza Sarmiento (dos puntos céntricos de gran afluencia de públicos y líneas de colectivos), directamente están ausentes.
Este déficit también ha sido atendido por el Concejo, con proyectos que piden la construcción de sanitarios en la zona del Galpón 11 (Cardozo), utilizada para la realización de actividades deportivas, recreativas, artísticas y comerciales, un lugar de referencia y encuentro para turistas y vecinos que no cuenta con esa infraestructura. Lo mismo pidió Cavatorta en dos expedientes para la instalación en el parque Irigoyen y el parque de la Cabecera.
Por otro lado, aún queda sin cobertura el sector sur del parque Independencia, algo que, según la Asociación Amigos del Parque, podría resolverse teniendo abiertos los de la Plaza de las Ciencias (ex International Park), donde hay baños públicos que fueron reacondicionados para los Juegos Suramericanos, pero el predio hoy está casi todo el tiempo cerrado. Solo se abre para eventos especiales o los domingos a la mañana, cuando funciona Calle Recreativa. La ex Rural también tiene baños públicos nuevos, pero si no está abierto el predio por algún acontecimiento de acceso libre, tampoco están a disposición.