Con tan solo 16 años, la hija de Johny Depp y la actriz francesa Vanessa Paradis, Lily Rose Depp, se convirtió instantáneamente en una celebridad. Y lo hizo sin esforzarse, le bastó con dejarse caer en la alfombra roja del Festival de Cine de Cannes y los fotógrafos hicieron el resto.
La joven musa de Karl Lagerfeld, apareció con un nada convencional diseño de Chanel, un atuendo casual morado con capucha y pantalones cortos, paseó su belleza con toda naturalidad, como si lo hubiera hecho toda su vida. Y el público se enamoró de ella, a primera vista.
Lily Rose Depp debutó como actriz en Cannes con la película "The Dancer" y admitió con inocencia su falta de madurez profesional. "Solo me he dejado llevar bailando en la película, esta es la primera vez que actúo", confesó sin pudro.
La revoltosa adolescente, que dejó sus estudios para dedicarse a la actuación, les dio un portazo a sus padres imponiendo su voluntad de empezar la misma carrera en la que ellos triunfaron. Viva imagen de su madre a su misma edad, ambas derrocharon belleza en la presentación del filme de Lily Rose.
Paradis, miembro del jurado en esta edición del festiavl, paseó por la alfombra roja a varios metros de distancia de su hija sin robarle protagonismo y, aunque hubiera deseado que esperara un par de años más para comenzar, reconoció sentirse muy orgullosa: "Siempre voy a apoyarla a cumplir sus sueños, me siento feliz por ella".
Por Rodolfo Parody