Cuatro años atrás, cuando se estrenó “Mujer Maravilla”, la crítica le levantó el pulgar. Algunos elogios fueron exagerados, es cierto, pero digamos que fue un voto de confianza. Después de tres películas fallidas como “El hombre de acero”, “Batman vs. Superman” y “Escuadrón suicida”, el tambaleante Universo Extendido de DC había levantado un poco la puntería con la película de su gran superheroína. La directora Patty Jenkins había conseguido (al menos) alejarse de la solemnidad depresiva post-Nolan y había apostado a una versión más clásica y fiel al origen del cómic. Desafortunadamente, no puede decirse lo mismo de “Mujer Maravilla 1984”, esta secuela que tardó meses en estrenarse por la pandemia del Covid y que no es más que un producto vacío, caprichoso y largo (dura dos horas y media).