Una pareja de jóvenes de la ciudad bonaerense de Mar del Plata tendrá trigemelas idénticas en plena pandemia por el coronavirus, un caso que se da en 200 millones, según las estadísticas.
felices los cinco. Giuliana y Facundo esperan a Aitana, Amira y Alice.
Una pareja de jóvenes de la ciudad bonaerense de Mar del Plata tendrá trigemelas idénticas en plena pandemia por el coronavirus, un caso que se da en 200 millones, según las estadísticas.
Giuliana Salvo, de 18 años, y Facundo Quinto, de 19, se conocieron en la escuela secundaria hace cinco años, se pusieron de novios y comenzaron convivir desde hace cuatro, en un departamento de la zona de la vieja terminal de ómnibus de la ciudad de Mar del Plata.
“Nos conocimos y fue un flechazo el que nos unió para siempre. Teníamos la idea de ser papás jóvenes y, sin quererlo, lo fuimos buscando y quedé embarazada, pero jamás me hubiese imaginado que de trigemelas ya que se da un caso cada 200 millones” contó Giuliana. quien hasta hace unos meses trabajaba en una imprenta familiar. Consultada sobre cómo fue ir a los controles en plena pandemia de la Covid-19, la futura mamá dijo: “Entré sola a hacerme la primera ecografía con todos los protocolos sanitarios y mi médica obstetra, Andrea Galarraga, me iba diciendo lo que veía y escuchaba, que eran tres corazones que latían sin parar, lo que emocionó no sólo a Facundo sino a toda la familia, que está revolucionada con la llegada de las tres mujercitas que formarán parte del núcleo familiar”.
Los futuros padres de Aitana, Amira y Alice están ansiosos para que en los primeros días de octubre cambien sus vidas con la llegada de las “chancletas”, que forman parte de un embarazo trigemelar monocorial triamniótico, que se da una vez cada 200 millones. “Estoy de siete meses y cada beba está en su bolsa con su cordón umbilical -están pesando aproximadamente hasta ahora 1,300 kilo- pero se alimentan las tres de la misma placenta” agregó Giuliana, quien es la más chica de cinco hermanas mujeres. Por su parte, Facundo manifestó: “En los próximos días nos estaremos mudando a un departamento más amplio teniendo en cuenta que no sólo llegarán las trigemelas sino que necesitamos entrar todos, con los dos perros que tenemos y el gato”.
Facundo, quien trabaja en una peluquería y barbería del microcentro, añadió: “La idea de mudarnos, además de que necesitamos espacio, es estar cerca para poder ayudar a Giuliana cuando nazcan las bebas. Su mamá nos dará una mano, pero vamos a necesitar muchos brazos para atenderlas”. Mientras tanto, Giuliana enfatizó: “Las nenas nacerán por cesárea en el Hospital Materno Infantil, donde semanalmente me hago todos los controles teniendo en cuenta que serán prematuras”.
“Las bebas están sanas y todo va excelente, sólo siento incomodidades a medida que las bebas crecen porque ya no tienen mucho espacio. Pero sentirlas es hermoso, no es una molestia”, dijo la futura mamá. La joven, quien hace un curso de preparto para la maternidad vía zoom, se mostró agradecida con la ayuda de vecinos, amigos y familiares, que le han acercado ropa, pañales, los primeros juguetes y hasta carritos para trasladarlas.
Además, “tenemos una cuenta de Instagram que se llama @trigemelas.mdp, donde mucha gente nos contacta para ofrecernos algo”.
Una placenta para las tres
“La gestación gemelar de tres bebés monocorial significa que tienen una placenta para las tres y que son idénticas genéticamente. De por sí se considera un embarazo de mayor riesgo porque tiene varias de implicancias. Y que tenga una sola placenta y en este caso sean tres bebés, es muy poco frecuente”, explicó la obstetra Andrea Galarraga (MP. 95039), quien señaló que Giuliana necesita un control más estricto que otros embarazos por esperar trigemelas, que se realiza a través de un protocolo de atención especial: “Hay ecografías específicas y hay que evaluar cómo está creciendo cada bebé, porque reciben alimento, sangre y oxigenación de una sola placenta”.
Lo que lo hace único a este caso, según la obstetra, es que la de las bebas trigemelas “fue una gestación espontánea”. “En los últimos años, en el mundo se incrementaron los embarazos gemelares, pero están relacionados con las técnicas de reproducción asistida”, advirtió.
Sobre las causas de este embarazo, indicó que puede darse “por un óvulo fecundado por un espermatozoide y que de acuerdo al día que se produjo una división celular, determinó que sean tres embriones”. “Por eso es tan infrecuente”, afirmó. Además, indicó que en este caso no tiene tanta trascendencia la genética, como en los casos gemelares comunes, que pueden darse por antecedentes familiares.
“Es muy difícil transcurrir el embarazo en la pandemia. Facu no pasa a los controles, no puede ver las ecografías ni escuchar los latidos”, explicó la joven, que señaló que “las bebas van a nacer prematuras”. “Hay que ver cuánto aguanta la placenta. Queremos que se queden en la panza lo que más puedan”, agregó.
“Son múltiples los parámetros que debemos chequear. En términos generales, el promedio de la gestación al nacimiento es de entre 32 y 34 semanas, que es más difícil. Las bebés necesitan neonatología y se les va a brindar toda la atención para controlarlas”, aclaró la obstetra, y remarcó que Giuliana “tiene un embarazo saludable y el nacimiento de las bebas trigemelas será por cesárea”.