"Ser adiestrador de elefantes es una profesión de alto riesgo. Los elefantes, como algunos humanos, son rencorosos y pueden atacar tras ciertos acontecimientos", añadió.
El diario Chronicle precisó que el adiestrador se llamaba Enock Kufandanda y tenía 50 años.
Tras el incidente, las autoridades abatieron a Mbanje, cuyo nombre significa "marihuana" en la lengua local shona. Estaba adiestrado para realizar excursiones, llevando personas en su lomo a las cataratas Victoria.
"Es un triste recordatorio de que los elefantes son animales salvajes que no deben ser montados", denunció la organización World Animal Protection en un comunicado en el cual reclama la interrupción de este tipo de actividades "crueles".
Hace dos años, un vendedor de souvenirs había muerto tras ser pisoteado por un elefante salvaje en el centro de Victoria Falls.