La visita del presidente Javier Milei al 140° aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) agitó al establishment local y, puntualmente, a toda la cadena del agro. En la entidad se trabaja a contrarreloj para la recepción y para manipular los reclamos de un sector que respalda el modelo, pero ya espera alguna devolución concreta.
La primera pregunta es si Milei juega de local en la tribuna de la Bolsa ante unos 800 invitados. La respuesta es sí, todavía. Luego de un aval en las urnas de la mayoría del ambiente -tuvo su apoyo la opción de Sergio Massa de algunos sectores de la cadena-, se presume esta vez ya no será tiempo de piropos sino que el reloj de arena se empieza a dar vuelta.
Concretamente, esperan definiciones sobre algunas medidas cambiarias y tributarias que mejoren el mercado de cereales. En términos futboleros, el agro espera que le devuelva una pelota para hacer una pared. Por lo tanto, los presentes medirán cada palabra del presidente en un marco en el que los gestos y las promesas bonitas van teniendo gusto a poco.
La tribuna para Milei
Con precios internacionales a la baja, retenciones que siguen sin moverse y un mercado cambiario para nada tentador, el sector empezó a demandar algún tranquilizante para sus incertidumbres y necesidades comerciales, a poco de empezar a sembrar maíz y luego soja. Todavía hay un 50% de la cosecha sin liquidar, toda una postal y un problema a resolver.
El presidente de la Bolsa de Comercio, Miguel Simioni, sugirió esa línea en “El primero de la mañana” de LT8. “Tenemos la mirada puesta en los precios de los commodities a nivel internacional, pero muy firme en las cargas tributarias internas que deben seguir discutiéndose”, sostuvo.
“Hay paciencia, se está esperando”, reconoció, pero agregó: “Ojalá que podamos revisar todo, internamente. No vemos que los precios de commodities cambien. El campo, la cadena, la agroindustria se lo ha hecho saber, esperemos que podamos encontrar y desatar ese nudo para que se pueda dar esa liquidación y no afecte al productor”.
image.png
El presidente Javier Milei presenciará el 140° aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario.
Uno de los reclamos más insistentes que seguramente se amplificará ante la presencia del ministro de Economía es el tipo de cambio, “nefasto” desde hace años según Simioni. No esperan una devaluación, eso ya lo rechazó más de una vez el propio presidente y también Luis Caputo, pero sí la unificación cambiaria.
“Nadie puede estar viendo un tipo de cambio y comprando con otro”, explicó Simioni. Hace una semana, en el aniversario de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el jefe del Palacio de Hacienda pidió de nuevo tolerancia por la cuestión cambiaria. “No queremos salir a las apuradas del cepo”, repitió e hizo interferencia en los presentes. Posiblemente ocurra lo mismo el viernes.
Frente a la posibilidad de que Milei ensalce exclusivamente como en los últimos meses el superávit fiscal y la baja de inflación, la Bolsa entiende que se debe seguir insistiendo. “Estamos viendo la carga de retenciones. Nadie pide devaluación u otra cosa. Un precio bajo que afecta a la rentabilidad del productor, es algo que incide en el futuro. En breve viene la siembra gruesa del maíz y luego en unos meses la de soja”, advirtió en espera de alguna respuesta para que se incite al productor a liquidar e invertir en las próximas campañas.
"Es momento de empezar a hablar de retenciones. No puede seguir un 33% en un negocio que da pérdida. La soja bajó 200 dólares en dos años. No todos piensan así, algunos pueden esperar más. Veremos si dice algo concreto en ese sentido", sostuvo un acopiador grande del sur santafesino.
Caputo sin micrófono
La decisión repentina de Presidencia de asistir al acto luego desistir de la invitación ya que tenía un viaje programado a México generó una revolución interna en los empresarios y cámaras asociadas a la entidad, que van desde corredores de granos, productores, acopiadores, molineros, agroindustria, incluso el mercado bursátil. De hecho, hubo que cambiar el cronograma.
La semana pasada, la Bolsa había anotado la presencia del ministro de Economía para suplir la ausencia del presidente de la Nación. Hasta se repartieron flyers a más de 300 empresarios e integrantes de la institución para asistir a una charla organizada como previa al acto, algo que había generado expectativas.
Finalmente, se postergó esa actividad en principio para el 20 de septiembre y, este viernes, se deberán contentar con los pronósticos del presidente, que muchas veces se encierra en la coyuntura y en laberintos económicos. ¿Esperanzas de que haya anuncios? Ninguna. ¿Esperanza de señales más concretas? Un poco más.