Esta semana, la princesa de Gales Kate Middleton anunció que había completado la quimioterapia en el marco de su tratamiento contra un cáncer que le diagnosticaron en el verano. El anuncio se hizo a través de un video familiar en el que aparece junto al Príncipe William y sus hijos, y en el que Kate menciona lo "increíblemente duros" que fueron los últimos nueve meses para ella y su familia. Los mensajes de personas de todo el mundo, dándole ánimo y celebrando el fin de esta etapa e incluso contando sus propias experiencias con la enfermedad, revelan que no siempre queda claro qué implica terminar una quimioterapia, desde el punto de vista médico.
¿Qué significa, entonces, finalizar una quimio? ¿Concluir con ese procedimiento implica una cura? ¿Puede haber una nueva quimioterapia más adelante? La Capital habló con un especialista para despejar dudas y aclarar algunas cuestiones vinculadas al cáncer, un tema del que todavía resulta difícil hablar con naturalidad aunque millones de personas tengan este diagnóstico cada año a nivel mundial.
Aunque en las imágenes a Kate Middleton se la ve relajada, y contenta por momentos, la princesa escribió este lunes: "El viaje del cáncer es complejo, aterrador e impredecible para todos, especialmente para aquellos más cercanos a uno. Con humildad, también te enfrentas cara a cara con tus propias vulnerabilidades de una manera que nunca antes habías considerado, y con eso, una nueva perspectiva sobre todo”.
La quimio, ese "viaje"
El médico oncólogo Sebastián Torres explicó que para tratar el cáncer hay tres grandes pilares con los que cuenta la medicina: radioterapia, cirugía y tratamientos sistémicos (entre los que se encuentra la quimioterapia). Dependiendo del diagnóstico, del estado general del paciente, de la edad, el estadío de la enfermedad y de la información que los médicos hayan podido obtener sobre el tipo de tumor (características biológicas, mutaciones, etc) "se puede recurrir a una de esas herramientas, a todas o algunas, y no se utilizan necesariamente en un mismo orden".
La cantidad de meses en las que se aplica la quimioterapia también dependen de un montón de variables particulares a cada individuo.
En el caso de Kate, quien nunca dijo cuál había sido exactamente su diagnóstico, aunque contó que atravesó una cirugía abdominal (que en un primer momento parecía simple y luego la obligó a permanecer dos semanas internada) la quimioterapia se le indicó luego de la operación. "Es una quimioterapia preventiva", explicó la princesa de Gales hace un tiempo.
"La quimioterapia se puede indicar luego del diagnóstico y antes de una cirugía para reducir el tamaño de un tumor y también se puede aplicar luego de la intervención quirúrgica. Si el tumor se pudo extirpar completamente se puede usar este tratamiento con drogas, que puede ser endovenoso y a veces oral, para eliminar las células cancerígenas que pueden haber quedado y así disminuir las chances de recaída", explicó Torres.
La esperanza de la cura
"La quimioterapia puede usarse para curar el cáncer, para reducir las chances de que regrese o para hacer más lento su crecimiento. Pero sin dudas, cuando se culmina la quimioterapia, es un momento clave que los pacientes, los médicos, los enfermeros, la familia celebramos porque el proceso es importante y significativo para la vida de una persona. Aunque se trate de alguien que tiene un tumor que sabemos que será curable, el solo hecho del diagnóstico, iniciar la quimioterapia, pasar por todo eso es realmente fuerte. Obviamente no todos los pacientes lo pasan del mismo modo. Muchos pueden incluso seguir con sus actividades laborales o sociales y otros no (durante la quimio). Creo que se la asocia siempre a algo negativo y da miedo, pero no todos los casos son iguales y ni siquiera con el mismo diagnóstico las respuestas son las mismas. Las comparaciones no sirven porque no hay dos personas iguales", reflexionó Torres.
"Es importante hablar de los avances en oncología. Las drogas que teníamos hace 20 o 30 años no son como las actuales, tenían muchos más efectos adversos y no eran tan eficaces. Actualmente contamos con muchos recursos y por eso las estadísticas muestran que la sobrevida en la mayoría de los tipos de cáncer es mucho más alta que hace un par de décadas", dijo el especialista.
Torres señaló que es "sumamente importante el estado anímico del paciente, el acompañamiento de la psicooncología, o de lo que el paciente sienta que emocionalmente lo ayuda".
¿Mejores chances en Europa?
El médico subrayó que las mismas drogas o esquemas de tratamientos para el cáncer que hoy se usan en la Argentina, en Rosario, son las mismas que en países del primer mundo.
"A la princesa de Gales no le dieron una terapia diferente a la que podríamos darle acá a un paciente. Obviamente ella no tiene que lidiar con las autorizaciones de las obras sociales, con crisis económicas, puede elegir no seguir trabajando si no lo desea durante la quimio (no todos pueden optar por eso). Si bien el acceso puede no ser el mismo, y no lo minimizo, los tratamientos aprobados que se aplican afuera hoy son globales y son los mismos que tenemos en el país".
Torres también puso el acento en la relación médico paciente y de todo el equipo que acompaña a una persona que tiene que hacer un tratamiento contra el cáncer. "Es crucial. Una buena comunicación entre todos los que forman parte hace que la persona atraviese esta etapa de una manera mucho más tranquila".