Todavía recuperándose de los dos disparos recibidos hace tres semanas, Dylan Cantero fue imputado por narcomenudeo. En la misma causa fue acusada su hermana Mariana Cantero y otras dos personas cercanas a la familia a las que les atribuyeron comercializar estupefacientes en la zona sur de Rosario. A una quinta imputada le reprochan la tenencia de una pistola.
La acusación contra los hermanos del líder de Los Monos apunta a que ambos estuvieron a cargo de la venta de drogas al menudeo en el barrio Las Flores al menos desde marzo pasado. La actividad, según Fiscalía, se interrumpió el 25 de septiembre luego de un allanamiento en una casa de Pasaje 528 al 6400, ubicada como punto de venta y fraccionamiento. Allí la policía secuestró un total de 776 gramos de cocaína y casi 2 kilos de marihuana prensada además de elementos propios de la venta minorista.
En la audiencia de este jueves se expuso además que en el marco de otra causa también surgió información que hoy se planteó como evidencia para incriminar a los imputados. Todo ese cúmulo de material terminó por ventilarse tres semanas después de que Dylan Cantero sobrevivió a un ataque a tiros que tuvo el objetivo de asesinarlo y sobre el cual, por el momento, la investigación de ese hecho no llegó a esclarecer ni motivos ni autores.
Narcomenudeo en Las Flores
Al ser dado de alta el pasado 28 de noviembre, tras diez días internado en el Hospital Clemente Álvarez, Dylan Cantero quedó demorado en el marco de una causa por narcomenudeo que lleva adelante el fiscal César Pierantoni. Este jueves presenció la imputación por zoom desde la cárcel de Piñero y vestido con el atuendo anaranjado propio de los presos de alto perfil. Por otro lado, en una misma sala desde el Order, su hermana Mariana y otras tres personas también escucharon los delitos que les atribuyó la Fiscalía.
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La imputación de Pierantoni plantea que Dylan Cantero, luego de recuperar la libertad a fines de 2024, y su hermana Mariana, en prisión domiciliaria por una condena federal a cuatro años y tres meses, tuvieron a su cargo a personas dedicadas a la venta urbana de marihuana y cocaína. Entre ellas aparece Melisa García, una mujer que está prófuga, y "La gorda Erica". Debajo de ellas había otras personas que se dedicaban del armado y el fraccionamiento de la droga que luego se vendía.
Otro de los imputados es Sebastián Reyna, de 27 años y primo de los hermanos Cantero. Fue quien, tras el ataque del pasado 17 de noviembre contra Dylan, se ocupó de cargarlo en el taxi en el que trabaja para llevarlo al hospital. Ahora lo acusaron de ser uno de los contactos con los puntos de venta de drogas, a los que presuntamente visitaba a bordo de un Renault Clío modelo 2014 que es de Mariana Cantero. Con un cargo similar imputaron a Luzmila Barrias.
Los Cantero en el sur a caballo
Entre las evidencias presentadas por Fiscalía aparecen más entrevistas a testigos de identidad reservada. Uno menciona a "Chuky", apodo de Mariana Cantero, como quien "maneja la zona" de Las Flores desde que "perdió el Ariel" (por la detención en 2022 de su padre "El Viejo" Cantero). Otro apunta a que Dylan tenía a su cargo el barrio conocido como El Mangrullo. También hay conversaciones telefónicas de líneas intervenidas que le atribuyen a distintos miembros de la familia estar involucrados en el narcomenudeo.
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El fiscal también mencionó la declaración de un testigo que contó haber visto varias veces a Dylan Cantero en movimientos que vinculó a la venta de drogas: lo hacía montando un caballo, antigua tradición de la familia. Además expuso evidencia el registro de 32 transferencias de dinero que Luzmila Barrias le hizo a Mariana Cantero entre mayo y septiembre pasado por un monto que apenas supera el millón de pesos.
A los hermanos Cantero, a Sebastián Reyna y a Luzmila Barrias la Fiscalía les imputó el delito de comercialización de estupefacientes. A Maia Solange Alcaraz, en tanto, la acusaron por tenencia ilegítima de arma de fuego de guerra y encubrimiento por el hallazgo de una pistola 9 milímetros en uno de los últimos allanamientos vinculados a la causa. Este viernes continuará la audiencia en la que el juez Rodrigo Santana deberá determinar las medidas cautelares para cada uno de los imputados.