Newell’s tiene varios jugadores que desconocen de qué se trata el clásico. Durante esta semana, principalmente, se fueron interiorizando de lo que representa. Y más allá de los consejos, comentarios y sugerencias sobre lo que significa, dependerá de la personalidad de cada uno asumirlo con la mayor entereza, sin dejarse llevar por el entorno y las presiones.
Saúl Salcedo, Juan Ignacio Méndez, Fernando Cardozo, Lucas Besozzi y Gabriel Carabajal son los que recién llegaron al club del Parque y todavía no participaron de un clásico. Matko Miljveic, incorporado a comienzos de la temporada, tampoco. No fue ni al banco en el anterior.
Los juveniles que de a poco se están insertando en la primera, tales los casos de Tomás Pérez o Mateo Silvetti, no tuvieron esa posibilidad, aunque sí lo vivenciaron en inferiores.
En ese sentido, Newell’s se encuentra en desventaja en relación a los futbolistas de Central. Es que el único futbolista rival que no protagonizó todavía un enfrentamiento entre leprosos y canallas, es Enzo Copetti. Todos los demás estuvieron, aunque sea sentados en el banco.
Siempre es mejor saber qué es lo que está en juego y cómo se juega. Pero si es tan determinante el hecho de jugarlo por primera vez recién se sabrá el sábado.
Julián Maidana, estreno ideal en Newell's
Hubo futbolistas que, sin ningún inconveniente, interpretaron rápidamente el clásico, pese a que era el primero que jugaban.
Julián Maidana debutó en Newell’s justamente contra Central y en el Gigante. Lo hizo con un gol, para la victoria de un equipo que se consagraría en ese torneo Apertura 2004. “Fue un debut soñado. Esta victoria es para los hinchas”, declaró en ese momento el defensor.
Tampoco le pesó la responsabilidad a Jorge Achucarro en su primera experiencia frente a Central, en el torneo Clausura 2009. En el Coloso, Newell’s perdía 2 a 0 y el delantero paraguayo asistió a su compatriota Joaquín Boghossian para el gol del descuento. Y señaló la conquista del definitivo 2 a 2.
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Horas después de semejante actuación, Achucarro le resaltó a Ovación “la pasión que tienen acá por el fútbol. No pude estar en el banderazo (estaba de gira con el seleccionado paraguayo), pero vi las imágenes. Fue impresionante. Están todos locos por Newell’s. Meter 25 mil personas no es normal ni se ve en otros lados”.
El clásico rosarino es una experiencia única, intensa, conmovedora, que los nuevos futbolistas de Newell’s vivirán desde adentro, con todo lo que eso implica.
Con el ánimo golpeado
Y el hecho de que Newell’s llegue golpeado por la goleada sufrida frente a Estudiantes en el Coloso le agrega un desafío, ante todo emocional, a esos jugadores que nunca enfrentaron a Central.
También tienen que hacerse cargo, aunque no haya sido responsabilidad de ellos, del historial adverso de la Lepra frente a Central en la última década. Es que la tolerancia del hincha rojinegro es cada vez menor y exige un resultado favorable.
Por el contexto y por el presente del equipo, jugarán un partido donde hay mucho en riesgo. Ante semejante situación, compleja, se pondrá más que nunca a prueba la entereza de cada futbolista. Los que sean capaces de afrontarlo, pueden quedar nada menos que en un sitial de privilegio en la historia del clásico.